Ayuso, en Barcelona: “No quiero crecer a costa de Cataluña sino junto a ella”

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, señaló este viernes en Barcelona que no quiere crecer “a costa de Cataluña”. "Quiero crecer junto a Cataluña porque juntos somos más fuertes”, proclamó. Habló de la necesidad de “volver a la política en positivo”, que es “la política de la unión”, y “hacer más y mejor España desde las comunidades autónomas”.

Ayuso -quien hizo estas declaraciones durante la apertura del ciclo ‘Agendas cruzadas Madrid-Barcelona’ organizado por el Círculo Ecuestre de la capital catalana- afirmó que “tanto el efecto capitalidad como la acusación de dumping fiscal a Madrid son dos excusas para no afrontar el fracaso del excesivo intervencionismo de los últimos años en gran parte de las autonomías españolas”.

Cataluña Suma

Ayuso ha afirmado que es “imprescindible” presentar a los partidos de centro-derecha unidos en la candidatura Cataluña Suma en las próximas elecciones catalanas.

Lo ha dicho después de que la portavoz de Cs en el Congreso, Inés Arrimadas, haya propuesto a los órganos de su partido que la formación naranja cierre acuerdos transversales con otras fuerzas constitucionalistas para concurrir juntos en las elecciones autonómicas de Cataluña, el País Vasco y Galicia.

“Ni la izquierda ni los independentistas quieren lo mejor para Cataluña. Quieren que a los demás les vaya mal. Por eso, tenemos que impedirlo desde la unión. Iniciativas como Cataluña Suma creo que son imprescindibles para las próximas elecciones autonómicas”, ha argumentado.

Para ella, la “única forma de evitar un gobierno liberticida e intervencionista en Madrid fue a través de la unión del centro-derecha”, y cree que ocurre lo mismo en Cataluña de cara a las próximas elecciones autonómicas. Así, ha llamado a “tener altura de miras y mirar a largo plazo” para lograr esta coalición, y ha destacado que para ello será necesario hacer cesiones, perder egos y obviar lo que divide a los partidos constitucionalistas.

“Después de lo que nos ha pasado en noviembre, no podemos volver a errar”, ha subrayado, en referencia a las elecciones generales del 10N, en las que cree que si PP y Cs se hubieran presentado juntos ahora el líder popular, Pablo Casado, sería presidente del Gobierno, y el exlíder del partido naranja Albert Rivera sería vicepresidente.

Ayuso ha tendido la mano a los que quieran luchar contra el independentismo y la izquierda, que considera que en el fondo buscan lo mismo: “En algunos escaparates lo vemos disfrazado de ultra-izquierda y en otros de independentismo, pero en esencia son lo mismo: su política consiste en reducir al individuo a la mínima expresión, someterlo a la masa grupal, cercenar su voluntad y ahogar sus alternativas hasta que su único camino sea seguir el mandato del líder supremo”.

Comparación con el brexit

La presidenta de la Comunidad de Madrid se ha referido al Brexit, que se hace efectivo este mismo viernes, y lo ha comparado con el proceso independentista: “Lo que nos estamos jugando es un nuevo Brexit, pero mucho más traumático. Porque en nuestro caso, además de las terribles consecuencias económcias, también tendríamos efectos devastadores desde el punto de vista emocional, social y hasta familiar”.

Además, ha reprochado al Gobierno estar “otorgando privilegios a la deslealtad” del independentismo en vez de liderar el constitucionalismo, y ha llamado a los partidarios de la unidad de España a ir juntos. “Solamente unidos podemos hacer frente al cambio de régimen que amenaza a nuestro país. Ya lo vimos en las últimas elecciones generales: el desmembramiento del centro-derecha liberal es la alfombra roja para un gobierno intervencionista y liberticida en La Moncloa”, ha subrayado.

Ante esto, aboga por construir puentes y superar la división entre izquierda y derecha: “Solo uniéndonos, en posturas moderadas pero firmes, y buscando nuestros puntos de encuentro, podremos proteger el sistema que más pluralidad y prosperidad ha traído a este país y a sus ciudadanos”. También ha alertado de que “ahora mismo España está amenazada por un Gobierno que pretende hacer un país de ganadores y perdedores”, y ha negado que exista un problema político ni territorial en España.