Vuelta al cole

Vuelta al cole: un regreso a contrarreloj en el Tomás Bretón

El Ayuntamiento terminará 24 horas antes las obras a las puertas del colegio de la zona Mahou-Calderón, centro al que acuden alumnos con problemas de movilidad

Los padres y madres de alumnos denuncian que, a día de hoy, el acceso es imposible debido a las zanjas, obstáculos y calles levantadas
Los padres y madres de alumnos denuncian que, a día de hoy, el acceso es imposible debido a las zanjas, obstáculos y calles levantadasJesus G. FeriaLa Razón

La capital afronta el inicio de curso escolar más difícil en mucho tiempo. Mil y una dudas y preocupaciones golpean a aquellos padres y madres que se enfrentan durante estos días a su particular vuelta al «cole». ¿Estarán nuestros hijos seguros? ¿Se mantendrán las distancias de seguridad oportunas? ¿Deberemos estar todos confinados en el caso de que se contagien? A todas estas preguntas, los padres del Colegio Tomás Bretón añaden por lo menos una más: ¿van a poder entrar nuestros hijos al centro?

Este colegio de Infantil y Primaria es, junto al Instituto Gran Capitán, el centro escolar más afectado por las obras del entorno Mahou-Calderón. A día de ayer, zanjas, obstáculos y calles levantadas hacían imposible el acceso al colegio. Existe un factor más a tener en cuenta: al Tomás Bretón acuden muchos niños y niñas con necesidades especiales y problemas de movilidad. Las clases deben comenzar el próximo martes, con la llegada de 500 alumnos.

«Es imposible acceder al Tomás Bretón a menos de cinco días del comienzo del curso escolar», afirma a este diario Susana de la Higuera, portavoz de la Asociación de Vecinos Pasillo Verde Imperial. Aparte, ven muy difícil que, de seguir así la situación, «se puedan mantener las distancias de seguridad».

LA RAZÓN se puso en contacto con el Área de Obras y Equipamientos del Ayuntamiento, que explica que las obras que ahora mismo afectan al Tomás Bretón, la ejecución de una acera de cuatro metros de ancho en la calle Alejandro Dumas, «se encuentra en un estado muy avanzado, finalizado el hormigonado y colocando el pavimento». De hecho, afirman desde el Consistorio, «está prevista la finalización de la misma el próximo 7 de septiembre», un día antes del comienzo de las clases.

Del mismo modo, el Ayuntamiento señala que, en la actualidad, el acceso peatonal al colegio «se realiza a través de un pasillo habilitado para ello en la calzada», limitado por sendas vallas de protección. Además, «están habilitadas las plazas de aparcamiento en línea en el Paseo de Melancólicos y en la calle Alejandro Dumas. En todo momento, el aparcamiento del colegio ha sido accesible desde la vía pública», indican.

Si bien en menor medida, el IES Gran Capitán también es uno de los centros educativos afectados. «En el Tomás Bretón es imposible entrar, pero al instituto se puede acceder a través de una zona vallada. Aunque en el Paseo de Melancólicos te encuentras con obstáculos y alcorques elevados», sostiene De la Higuera. En este caso, Obras y Equipamientos responde que la acera de acceso por el Paseo de Melancólicos «está finalizada, pendiente de la colocación de la valla de protección en la acera». Mientras, el acceso por el Paseo de los Pontones «se encuentra operativo» y se ha mantenido la acera existente que posibilita la entrada por la puerta posterior. «Tanto los accesos peatonales como el aparcamiento provisional han sido consensuados con el equipo directivo del centro», sostiene el Consistorio. Además, la calle peatonal Duque de Tovar, entre el Paseo de los Melancólicos y la calle Alejandro Dumas «estará finalizada el 15 octubre si no hay contratiempos».

En todo caso, los vecinos creen que el Colegio Tomás Bretón «tiene un problema crónico de acceso». De hecho, una de sus reivindicaciones, finalmente recogida en la memoria del proyecto del entorno Mahou Calderón, es la instalación de un nuevo parque que permita «un acceso directo a la entrada del colegio».

Ruido y polvo

Así, otra de las peticiones de los afectados es retomar la comisión de seguimiento de las obras. Una iniciativa que nació cuando comenzaron los trabajos y que, entre otros objetivos, tiene como meta la medición de los niveles de ruido y polvo, debido a las enormes molestias que causan a los vecinos. Debido a la crisis del coronavirus, la comisión se paralizó.

Desde Obras y Equipamientos explican que la Junta Municipal de Arganzuela, «tal y como ya ha venido anunciando», convocará la comisión a finales de este mes de septiembre. Y es que, sostienen, la interlocución de la Junta, con todos los vecinos se ha producido «desde el minuto uno».