Cibeles

El ‘no socio’ Vox: Más Madrid y PSOE reciben más apoyo que los de Ortega Smith

Los dos partidos de izquierdas obtienen más apoyo en los Plenos para sus iniciativas que Vox, a pesar de que este grupo es clave para que Almeida y Villacís saquen adelante sus cuentas

Debate del estado de la ciudad
Martínez-Almeida y Ortega Smith, durante un Pleno municipalJuan Carlos HidalgoAgencia EFE

Las próximas semanas serán cruciales para la negociación de los presupuestos en el Ayuntamiento de Madrid. Todos los departamentos del Gobierno de José Luis Martínez-Almeida ya han dado forma al borrador de las cuentas para el próximo año. Una negociación de puertas para adentro entre el Partido Popular y Ciudadanos que, según apuntan desde Cibeles, ha permitido alumbrar unos presupuestos sociales que dan respuesta a la situación de emergencia que vive la ciudad como consecuencia de la pandemia y que, además, suponen el contrapunto a las subidas de impuestos diseñadas en Moncloa.

Con los votos de PP y de Cs, sin embargo, no será suficiente. Deberá entrar Vox en la ecuación. O por el contrario Almeida y su número dos, Begoña Villacís, deberán abrir una negociación con Más Madrid o PSOE hasta alcanzar el umbral de la mayoría absoluta.

La lógica invita a pensar en que la capital tendrá nuevas cuentas en 2021. Sin embargo, la realidad de las votaciones que se han sucedido en Cibeles desde el arranque de legislatura demuestran que Vox es el grupo de la oposición que menos iniciativas ha conseguido sacar adelante a pesar de someterlas a debate en un Pleno con mayoría de centro derecha. Tanto el Partido Socialista como Más Madrid han conseguido aprobar más propuestas que los de Ortega Smith. Pese a este circunstancia hay que destacar el alto nivel de iniciativas que estos tres grupos de oposición consiguen consensuar y ver avaladas por, al menos, la mayoría de los ediles presentes. El hecho de que el Gobierno municipal no cuente con mayoría absoluta y el añadido de que en los ayuntamientos se aborden con frecuencia cuestiones que van más allá de la confrontación política por concernir a realidades muy próximas a los vecinos ayudan a explicar estas cifras.

Pese a todo, Vox es el grupo menos respaldado en Cibeles. Desde el arranque de la legislatura, en junio de 2019, Vox ha llevado al Pleno municipal un total de 40 propuestas. De ellas han sido aprobadas 27. Destaca el hecho de que 12 de estas iniciativas hayan recibido el aval de todos los grupos, incluidos el PSOE y Más Madrid. Otras 13 propuestas salieron adelante tras recabar el «sí» del Partido Popular y de Ciudadanos. En una ocasión, los de Ortega Smith consiguieron el aval mayoritario del hemiciclo municipal con el respaldo de PP, Cs y Más Madrid. En otra ocasión, además del voto de los grupos de Almeida y Villacís contaron con el apoyo de Más Madrid.

De las 13 iniciativas de Vox que han sido rechazadas en este año y medio de mandato, la inmensa mayoría –un total de 11– han sido tumbadas tras recibir el «no» del resto de grupos. En otra ocasión, Vox no logró aprobar la iniciativa por el rechazo de Más Madrid, Ciudadanos y el PSOE; y, por último, otra iniciativa recibió el rechazo de PP, Más Madrid y Ciudadanos.

Esas 27 iniciativas aprobadas son menos que las que han conseguido aprobar los dos partidos de izquierdas en el consistorio, PSOE y Más Madrid, pese a «jugar» en un terreno menos propicio dado el equilibrio de fuerzas que decidieron los madrileños en las elecciones de mayo del pasado año. Más Madrid, el grupo que cuenta con más ediles y liderado por la ex de Podemos Rita Maestre, ha llevado para su debate y posterior votación 48 propuestas, de las que 31 han sido aprobadas y 17 han sido rechazadas. El PSOE de “Pepu” Hernández presenta unas cifras todavía mejores: con 41 propuestas llevadas al Pleno, ha conseguido que 32 sean aprobadas y solamente 9 rechazadas, lo que supone en la práctica que caso ocho de cada diez iniciativas de los socialistas reciben la luz verde del Pleno.

Las circunstancias excepcionales que atraviesa la ciudad con motivo de la pandemia ha provocado que se celebren menos plenos de los que se hubieran convocado en un escenario de normalidad. Todo ello ha trastocado también la agenda con la que los grupos afrontaban la legislatura. Más allá de esto, llama la atención que en un Pleno en el que, a menudo, se viven debates con altos niveles de crispación, casi el 70% de las propuestas de los partidos de la oposición sean finalmente aprobadas.