Por Salud Pública

El Gobierno prohíbe todas las manifestaciones por el 8M en Madrid

La concentración de hasta 60.000 personas, en al menos 104 concentraciones en puntos cercanos entre sí, han motivado la decisión de cancelación total, afirma el delegado del Gobierno, José Manuel Franco

No es no. La Delegación del Gobierno en Madrid ha decidido prohibir todas las convocatorias de manifestaciones o de concentraciones que habían sido comunicadas para los días 7 y 8 de marzo en la Comunidad.

La decisión se ha tomado “por motivos de salud pública” tras estudiar los recorridos, previsión de asistencia, duración o lugares de celebración que se habían comunicado.

La decisión llega al tiempo que el Ministerio de Sanidad, como ha adelantado LA RAZÓN, propone un cierre perimetral de las comunidades, toque de queda a las 22:00 horas, limitar las reuniones sociales a un máximo de seis personas, y prohibir procesiones y otros eventos masivos.

El delegado del Gobierno, José Manuel Franco, ha resaltado que, “en un momento en el que la Comunidad de Madrid sigue siendo uno de los territorios de España con mayor índice de contagios así como de personas hospitalizadas, por encima de la media nacional, no procede este tipos de manifestaciones”.

Lo cierto es que la concentración de hasta 60.000 personas previstas en las marchas del 8M en puntos cercanos entre sí de la capital los días 7 y 8 de marzo y la movilidad de los asistentes han sido los motivos de la prohibición total de manifestaciones esos días, ha afirmado esta mañana en rueda de prensa el delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco.

Tal y como ha explicado, ha sido “decisivo” la confluencia de varias protestas en el centro de la capital, así como “los desplazamientos que se iban a ocasionar”, según un mapa adjunto con los puntos de esas concentraciones que ha mostrado.

Franco ha indicado que el sumatorio de dichas protestas llegaría a 60.000 personas, según las previsiones de los propios convocantes, que podrían ser más “moviéndose en diferentes calles de Madrid y en un modo preferente en esa zona” céntrica.

El representantes del Gobierno central en Madrid ha aducido también que la región sigue siendo unos de los territorios con mayor índice de contagios por coronavirus y hospitalizaciones “muy por encima de la media nacional”.

Por eso, el delegado ha querido mandar un “mensaje claro y contundente a todos los madrileños, un mensaje de prudencia, responsabilidad, sentido común, para parar los contagios todos juntos y acabar con la pandemia”.

No ha habido cambio de criterio

A preguntas de los periodistas, José Manuel Franco ha respondido que no ha existido cambio de criterio, “sino de condiciones”, pese a que la semana pasada indicó que se prohibirían las manifestaciones con número superior a 500 personas previstas frente al criterio del Ministerio de Sanidad.

“El problema no es numérico, sino la gran acumulación de concentraciones y problemas en desplazamientos. A lo que hay que añadir las recomendaciones de Consejería de Sanidad diciendo que eran adecuado de prohibir eventos de mucha acumulación de personas. No son motivos sectarios ni ideológicos, sino de preservar la salud de los madrileños. No se trata de prohibir, hemos dado buenas muestras de ello”, ha esgrimido.

El delegado del Gobierno ha detallado que había 104 manifestaciones y concentraciones comunicadas para el 7 y 8 de marzo, el 70 por ciento relacionadas con el Día de Mujer. “El problema no es cuantas se han prohibido y dejado de prohibir en estos momentos. El problema es la acumulación de las mismas en pocos días, horas y lugares. Lo responsable, lo serio, el sentido común nos dicta este tipo de recomendaciones: preservar la salud de los madrileños”, ha dicho.

Franco reconoce que alguno de los perjudicados con su decisión pueden presentar recurso ante los tribunales e incluso pueden fallar a su favor, pero que desde la Delegación “se ha actuado en conciencia y en función de los datos que tenían”.

Respecto a la posibilidad de que finalmente se produzcan concentraciones no autorizadas, como las anunciadas ya por el Sindicato de Estudiantes, el delegado “confía muchísimo en la responsabilidad de todos los madrileños”. Por eso, asegura que no contempla ese escenario y cree que la gran mayoría de las personas harán “un ejercicio de responsabilidad”.

Por su parte, la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha criticado este jueves a quienes “quieren negar el derecho a la calle” a las mujeres y que, a pesar de “hacer caso a las recomendaciones de las autoridades sanitarias” están haciendo un “señalamiento” al feminismo.

“A mi, a nosotras, no nos van a encontrar en esa criminalización del movimiento feminista”, ha insistido, para añadir que en Igualdad van a encontrar “una oposición a esa España gris y machista” de la “extrema derecha” que quiere que las mujeres “vuelvan a sus casas”.

Por su parte, el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, ha celebrado la “prudencia” de la Delegación del Gobierno prohibiendo las manifestaciones del 8M, Día de la Mujer.

“Consideramos que no es tiempo de manifestaciones ni de concentraciones masivas de personas, en las que es prácticamente imposible garantizar que se cumplan las más elementales medidas de seguridad, como son la utilización de las mascarillas y guardar la distancia mínima exigible”, ha señalado el titular de Sanidad, durante la sesión de control del Pleno de la Asamblea.

“Ojalá hubiera tenido esa misma prudencia el año pasado, cuando también advertimos del riesgo que se corría con la celebración de la manifestación del 8M”, ha apuntado a continuación.

En este punto, ha trasladado que desde el pasado 28 de febrero les han remitido, desde la Delegación del Gobierno, hasta 86 solicitudes para valoración técnica por parte de la Dirección General de Salud Pública.

“En la mayoría de los casos se trata de concentraciones de entre 30 y 50 personas, y muchas de ellas son de trabajadores delante de sus propias empresas. Valoración que, en todos los casos, se está realizando en base única y exclusivamente a criterios técnicos”, ha manifestado.