Infraestructuras

2022: cien millones para modernizar juzgados

Las localidades de Valdemoro, Getafe, Móstoles, Torrejón y Collado Villalba tendrán nuevas sedes judiciales

El aspecto que tendrá el futuro edificio de juzgados de Getafe
El aspecto que tendrá el futuro edificio de juzgados de GetafeLa Razón

Modernizar las infraestructuras judiciales de la Comunidad es una de las prioridades del área que dirige el consejero Enrique López. Por eso, dos de cada diez euros del presupuesto total de la Consejería de Justicia (493 millones de euros) irán destinados a este fin. Es decir, se dedicarán 99,1 millones, lo que supone un incremento del 8,49% respecto a las cuentas autonómicas de años anteriores.

16.150.000 euros serán para construir nuevos edificios que darán respuesta a las necesidades de la Administración de Justicia en los partidos judiciales de Valdemoro, Getafe, Móstoles, Collado Villalba y al diseño del proyecto de Ciudad de la Justicia en Valdebebas. Las obras forman parte del Plan Justicia 21x21, de modernización de las infraestructuras de los 21 partidos judiciales de la región para el periodo comprendido entre 2019-2023 que está dotado con 100 millones de euros.

«Se trata de mejorar la calidad y calidez del servicio público que la Administración de Justicia madrileña presta a los ciudadanos, así como las condiciones en las que a diario desarrollan su trabajo jueces, fiscales y demás personal y funcionarios judiciales y solucionar el problema de la dispersión de sedes judiciales dentro de un mismo partido judicial», aseguran desde la Consejería de Justicia.

¿Qué es lo que cambiará en cada uno de los municipios? En Valdemoro, por ejemplo, está previsto que se ponga en funcionamiento un nuevo juzgado mixto y comenzarán las obras de construcción de los nuevos juzgados con una inversión prevista de 17,2 millones.

Getafe tendrá un nuevo edificio de juzgados, cuya inversión asciende a 9,1 millones de euros. Además, se prevé licitar la redacción de un proyecto básico y de ejecución para la reforma de la sede actual de la Avenida Juan Carlos I. También en el sur, en Móstoles, se redactará el proyecto básico y de Ejecución de un nuevo edificio de juzgados mientras que en Collado Villalba se continuará con las obras de ampliación de las sedes judiciales ya existentes.

Mientras, en Torrejón de Ardoz seguirán las obras de construcción del nuevo edificio de juzgados, cuya finalización está prevista para 2023 con una inversión de 17,5 millones.

Ya en Madrid capital, se adecuarán espacios para la puesta en funcionamiento de los Juzgados de lo Social Nº 46 y 47 de Madrid y de dos secciones en la Audiencia Provincial de Madrid. Mientras, la futura Ciudad de la Justicia seguirá avanzando en 2022 con la redacción del proyecto jurídico-económico, que tiene un coste aproximado de 400.000 euros. Levantar una ciudad de la Justicia ya se pensó en el año 2004. Se proyectaron 15 edificios y la inversión superó los cien millones de euros, pero sólo llegó a levantarse el famoso «dónut» en el que se invirtieron 22 millones. El viejo proyecto de ubicar en un solo complejo los juzgados de Madrid resucita después de más de una década de parálisis de un proyecto atrapado en los juzgados. Libre ya de trabas judiciales el primer edificio que ya está en funcionamiento es el famoso «dónut» convertido en Instituto de Medicina Legal (IML) que ha funcionado como morgue durante la pandemia. «Desde la comunidad seguimos mejorando la dotación presupuestaria que nos debe permitir mejorar un servicio tan importante para los madrileños como es el de la administración de justicia. Vamos a impulsar proyectos tan importantes como la Ciudad de la Justicia de Madrid o los nuevos complejos judiciales de Valdemoro, Torrejón o Collado Villalba, dando continuidad al Plan Justicia 21x21 de modernización de las infraestructuras Judiciales», asegura el consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Enrique López.

Señalética en braille y pictogramas

Todos los edificios judiciales están pensados para hacer recintos humanizados. Es por esto por lo que ya hay recorridos diferenciados para víctimas (especialmente las más vulnerables) y los agresores, para que no haya posibilidad de encontrarse. También habrá salas de lactancia y office. Otro de los objetivos será hacer sedes judiciales más accesibles. Por ello se viene trabajando en varias líneas, una de las cuales pasa por la eliminación de barreras existentes con rampas de acceso o señalética en braille o pictogramas.