Polémica

La Fiscalía requiere a la Policía que remita toda la información sobre los cánticos machistas en el Colegio Ahuja

El Ministerio fiscal abre una investigación para dilucidar si se cometió un delito relativo a los derechos fundamentales a raíz de los gritos de “putas” y “ninfómanas” de un grupo de jóvenes de la residencia masculina

Después de que ayer el Ministerio Público anunciara que entraría en el análisis de los gritos machistas de los jóvenes del Colegio Elías Ahuja, este viernes se concretan las actuaciones: la Fiscalía Provincial de Madrid ha incoado unas diligencias de investigación y ha requerido un informe a la Policía para que recabe todos los datos sobre qué pasó el domingo en el que los chicos terminaron gritando “putas” y “ninfómanas” a sus compañeras del Colegio Santa Mónica.

La polémica se inició con un vídeo que se viralizó a lo largo del día y que terminó por convertirse en el centro del debate político. A última hora del día el Movimiento contra la Intolerancia presentó una denuncia que se ha convertido en el inicio de unas diligencias. Fuentes del Ministerio fiscal confirman que ya se han incoado las diligencias que buscan “dilucidar si se ha cometido un delito relativo al ejercicio de los derechos fundamentales y libertades públicas”. Y para ello el primer paso ha sido pedir a la Policía que recabe toda la información sobre el suceso.

Por el momento los detalles que se han hecho públicos es que el joven que comenzó los cánticos ha sido expulsado del colegio que está adscrito a la Universidad Complutense de Madrid. “Putas, salid de vuestras madrigueras como conejas... sois unas putas ninfómanas, os prometo que vais a follar todas en la capea, ¡vamos Ahuja!”, gritaron desde su ventana decenas de chicos al edificio de enfrente en el que se encontraban sus vecinas.

Las jóvenes del Mónica que han sido entrevistadas por diversos medios a la entrada del colegio han enmarcado la actuación de ellos en un contexto de “tradición” previo a una capea y, si bien muchas ven machistas los gritos, han tratado de quitar hierro al suceso.

La denuncia ha sido presentada por este colectivo como un delito de odio. Su presidente Esteban Ibarra declaró ayer en la Cadena SER que los jóvenes actuaron de “manera sincronizada” al abrir al unísono sus ventanas y proferir los gritos. De forma “coordinada y deliberada”.

El difícil encaje penal

Sin embargo, los jurista consultados dudan que estos hechos puedan tener encaje en el Código Penal porque el conocido como delito de odio penaliza a quienes incitan y agitan la discriminación o la violencia contra un colectivo por razón de sexo, orientación sexual, religión, ideología... Pero la jurisprudencia del Tribunal Supremo ha matizado que debe ser un colectivo “especialmente vulnerable”.

La Ley conocida como ‘solo sí es sí' entra en vigor precisamente este viernes y en ella sí se contempla un delito como el acoso callejero que, si bien no conlleva cárcel, está penado con multas y trabajos para la comunidad. Pero aquí también hay problemas: necesitan de la denuncia de las víctimas (que en este caso por las declaraciones de las estudiantes no parecen querer acusar a sus compañeros) y, además, los hechos sucedieron antes de que esta legislación estuviera activa.

En cualquier caso, la Fiscalía ha iniciado este proceso prejudicial y tendrá que valorar si, después de este primer estudio, judicializa el caso o, como es más previsible, termina en un archivo.

La polémica

Si el jueves se pronunciaba el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder de la oposición Alberto Núñez Feijóo con palabras de repulsa, este viernes la presidenta de la Comunidad de Madrid ha marcado distancias con el asunto. “Lo que condeno es que la Fiscalía esté centrada de repente en esto”, ha expuesto cuando le han preguntado si censuraba este comportamiento.

Por su parte, el portavoz de Vox en el Ayuntamiento de la capital, Javier Ortega-Smith, ha condenado “totalmente” los insultos y los ha calificado de “falta de respeto”.