Desaparecidos

El menor hallado en un vertedero de Toledo no presenta signos de violencia y la muerte pudo ser accidental

La Policía cree que el mayor de los dos no falleció el mismo día de la desaparición, sino en fechas posteriores, mientras se busca al primo, de 11 años

El cuerpo sin vida de Fernando Fernández García, el mayor de los menores desaparecidos en Carabanchel el 10 de diciembre ha sido encontrado en un vertedero de Toledo.

Agentes de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Madrid se han desplazado hasta allí. El cuerpo del menor se ha encontrado en una cinta transportadora del vertedero, y ahora se busca el cuerpo de su primo de 11 años.

Las últimas imágenes de los primos los sitúan en el metro de Marqués de Vadillo, en donde se pierde su rastro.

El jefe superior de la Policía de Madrid, Manuel Soto, ha confirmado este extremo, en una rueda de prensa sobre el dispositivo de Navidad y Nochevieja, tras el hallazgo de un cadáver en este vertedero provincial de Toledo. Se ha confirmado la identidad de este cuerpo y están buscando más restos y si hubiera otro cadáver en la zona.

“Desde la desaparición, nos hemos volcado con la investigación de este caso, por parte del Grupo de Policía Judicial, también del Grupo de Desaparecidos de la Brigada Provincial y hemos estado todos los días de forma permanente buscándolos. Y tras el hallazgo hemos trasladado de forma inmediata información al Grupo de investigación y estamos mirando”, ha detallado.

La Policía Nacional investiga ahora cómo murió y llegó hasta Toledo el menor junto a su primo. El cuerpo, que se encontraba completo y sin aparentes signos de violencia -aunque con el deterioro propio del tratamiento de residuos-, no había sido identificado por la Policía hasta la mañana de este miércoles, cuando la huella dactilar ha relevado que se trataba de Fernando Fernández, han informado fuentes policiales.

Hasta el vertedero se han desplazado de forma inmediata los investigadores de la desaparición, de la Policía Judicial de Villa de Vallecas, así como agentes de Homicidios y Policía Científica de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, aunque será la de Toledo la que investigue las circunstancias de la muerte del joven.

Mientras tanto, los agentes continuarán buscando en el mismo Ecoparque a Ángel, el primo pequeño de 11 años, ya que estaban juntos cuando se les perdió la pista y conformaban un “binomio”, por lo que podrían haber corrido la misma suerte.

Los investigadores manejaron desde el primer momento como principal hipótesis que se trataba de una desaparición voluntaria. De hecho, tenían constancia de que los dos primos habían abandonado la Comunidad de Madrid después de que se les perdiese la pista al salir del Hiper Usera ubicado en la calle General Ricardos de la capital.

Por esa razón creen que el mayor de los dos no falleció el mismo día de la desaparición, sino en fechas posteriores, han apuntado las mismas fuentes policiales.

Según los resultados preliminares de la autopsia, el cuerpo de Fernando no presentaba signos de violencia, aunque habrá que esperar a las conclusiones definitivas para conocer la circunstancias en las que murió.

La Policía está siguiendo ahora el rastro de los restos entre los trabajadores del Ecoparque que encontraron su cuerpo el pasado día 15.

Allí se realiza el tratamiento de residuos de los municipios de Toledo gestionados por el Consorcio de Servicios Públicos Medioambientales, que presta servicio a 196 localidades de la provincia, que suman más de 600.000 habitantes.

La familia de los dos menores, que se concentró el pasado lunes en Carabanchel para reclamar su vuelta, ha explicado que ambos fueron al Hiper Usera en el que se les perdió la pista a comprar un bocadillo mientras el padre de uno de ellos estaba en una lavandería muy próxima: “Sólo llevaban dos euros”.

A preguntas de los periodistas, que se han agolpado esta mañana bajo las viviendas de los familiares, han indicado que la Policía aún no les había comunicado que el cadáver hallado en el vertedero de Toledo era el de Fernando Fernández.

La madre de uno de los chicos había pedido, hace escasos días, en declaraciones recogidas en el programa Espejo Público, de Antena 3, que quien tenga a su hijo se lo devuelva. “Es un niño bueno”, explica. También han lazado mensajes en otros medios de comunicación, como Telemadrid, pidiendo a los chicos que, si se habían marchado, volvieran. Los menores nunca se habían ido antes sin avisar y no tenían problemas con la familia. De momento la investigación continua abierta.

Desaparecidas

En este mismo plano de desapariciones sin resolver en la Comunidad de Madrid, familiares, amigos y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad buscan a una mujer de 26 años que fue vista por última vez el domingo 11 de diciembre en la localidad madrileña de Villalbilla, ha informado la asociación SOS Desaparecidos.

La mujer se llama Jessica María Carvajal Flórez. Mide 1,60 metros de altura, tiene complexión delgada, pelo rubio, liso y largo y ojos marrones.

Asimismo, se busca desde el 15 de noviembre a Shirley Martínez Lucas. Mide 1,69 metros, tiene el pelo entre moreno y castaño y los ojos marrones. Lleva un piercing en la nariz, un tatuaje en el ojo (punto) y cuenta con una cicatriz en el cuello.

Desde SOS Desaparecidos han facilitado los números 642 650 775 y 649 952 957 para contactar en caso de avistar o de conocer algún detalle que pueda ayudar a encontrar a estas mujeres desaparecidas. Ante cualquier pista, también se puede llamar a los teléfonos 061 (Guardia Civil), 091 (Policía Nacional) o el 112 (Emergencias).