Enología

La Bodega Cuarto Lote se convierte en destino de iniciados del vino

Es un lugar que hoy se marca en las agendas de enoturismo. Se elabora un vino rosado a la manera de la moda provenzal

La bodega Cuarto Lote con el enólogo Daniel Orusco
La bodega Cuarto Lote con el enólogo Daniel Oruscolarazon

El municipio de Nuevo Baztán, es uno de los más pequeños de la Comunidad de Madrid, y al mismo tiempo uno de los de mayor raíz histórica. Fundado a principios del Siglo XVIII bajo la inspiración del consejero real Juan de Goyeneche, atesora patrimonio histórico-artístico y una visita recoleta. Aquel navarro ilustrado urbanizó el municipio de un modo singular mediante el modelo de la retícula ortogonal, y fue descrito por el gran arquitecto que ha sido Chueca Goitia como propio de lo que fue el urbanismo castizo. En ese entramado del ilustrado Goyeneche que incluyó una fábrica de vidrio, también había viñedo. La familia Calvo Gonzalez Vallinas, quinta generación, propietaria del Palacio ha ido aglutinando la herencia de aquel visionario, y precisamente la cuarta parte que faltaba ha sido la que da nombre a esta pequeña bodega.

La finca se conoce como Arrabal de Conjuro, y en unos edificios cerrados a modo de corral se alza una historia de fidelidad a la historia y a un modo de respetar el terruño. El enólogo Daniel Orusco selecciona la uva de la zona para elaborar un vino de gatos. En el logo de todos los ejemplares de la bodega figura un gato subido a una escoba con la que se simboliza una vieja leyenda de la localidad por una dama despechada por mal de amores, y que cuentan tenía poderes mágicos, la llamada señora de Valmores, así como el animal por el que hoy se conoce a los habitantes capitalinos tras la toma de la ciudad frente a los musulmanes. Historia pero también una realidad palpitante, la de Cuarto Lote, que se ha convertido en poco tiempo en uno de los lugares que hoy se marcan en las agendas del enoturismo. Visitar la bodega es respirar, como reconocen sus responsables, aquella historia, aquellas alquerías e incluso un pozo de agua corriente ideal para la conservación del vino.

El mundo agrario que defiende la bodega comienza con un aceite de arbequina de mucha limpieza aromática, con bonitas notas herbáceas y con el equilibrio propio de la variedad, calificado por su elegancia. La saga enológica comienza por un blanco de uva malvar de mucha frescura y con la sencillez de hechuras, a la que se le dota de volumen gracias a la fermentación con sus hollejos. Asimismo se elabora un vino rosado a la manera de la moda provenzal, de bastante buena boca, e ideal para esos momentos de la media tarde madrileña en la ciudad o en el campo. Espléndido acompañante para una merienda de días familiares.

Son tres las cartas tintas con las que se juega en la baraja genuinamente madrileña. Por un lado, el vino que da nombre a la casa, gracias a la tempranillo y algo de merlot, que se configura como uno de esos vinos de armónica expresión, con la madera justa y la buena presencia del frutillo rojo, con el que amenizar perfectamente comidas ligeras y copas de buena barra. Mayor complejidad posee el vino etiquetado como Arrabal del Conjuro, a la que se añade la más compleja cabernet sauvignon, y en la que se pueden apreciar notas terciarias muy apetecibles, y una mayor longitud en su beber. Y el que está llamado a ser un vino para guardar con avaricia son las escasas botellas del Bálsamo de Fierabrás. Su nomenclatura quijotesca esconde un tempranillo de cepas viejas y merlot criado en barricas de roble español, el cual le aporta una personalidad única.

Cuarto lote es una de esas bodegas que justifican la D:O vinos de Madrid, sin perjuicio de que como piensan muchos expertos merecen mayor difusión y apoyo. Beber vinos en Nuevo Baztán es combinar saberes centenarios con sabores actuales.

Bálsamo de Fierabrás
Bálsamo de FierabrásLa Razón

Vino de culto

Bálsamo de Fierabrás es vino de culto, largo pero sutil y el que el diálogo entre lo frutal y lo especiado alcanzan niveles más que estimables.