Para gente sociable

Así es Timeleft, la app de moda para cenar con desconocidos en Madrid

Se trata de una aplicación por suscripción que ya opera en varios países de Europa y otras ciudades españolas

Los restaurantes y cafeterías tampoco te pueden cobrar por pedir agua del grifo
El número de comensales establecido en Timeleft es seisLa Razón

Aunque parezca sacado del guion de una comedia romántica, quedar a cenar con cinco desconocidos ya es posible en la capital. Timeleft aterrizaba hace una semanas en Madrid con el propósito de multiplicar las relaciones sociales de la gente adulta. Ya sea por falta de tiempo o de contactos, cada vez resulta más difícil conocer a gente fuera de un entorno laboral, especialmente para aquellos que rehúyen de las aplicaciones de citas convencionales. Sí es cierto que esta app es de pago, con precios por suscripción: desde un mes por 19,99 euros, tres meses por 49,99 o seis meses por 69,99.

Desde la aplicación aseguran que este formato de planes entre seis personas, hace que los participantes se sientan más seguros a la hora de asistir al plan. Esta app ya está disponible en otras ciudades como Málaga, Sevilla, Valencia o Barcelona, aunque en Madrid, de momento, sus quedadas solo se organizan los miércoles a las 20:00. Anteriormente, también ha llegado a países como Reino Unido, Portugal o Francia.

El criterio para seleccionar a los comensales de cada cena se rige por un algoritmo de compatibilidad, tras realizar un test de personalidad. Obviamente, la ubicación o los gustos en alimentación también son un factor. La aplicación, como cualquier otra, también cuenta con un chat para poder hacer preguntas y romper el hielo, algo necesario cuando quedas con cinco desconocidos. Además, el restaurante que albergará la cena no se conoce hasta un día antes, el martes en el caso de Madrid.

Aunque pueda parecer inspirado en el programa «First Dates», la app acumula reseñas de todo tipo, desde experiencias para no repetir, hasta quedadas satisfactorias por las que se recomienda usar la aplicación. Sí es cierto, que los usuarios coinciden en que la experiencia no es igual en todas las ciudades. De hecho, también se pude valorar la participación del resto de comensales tras vivir la experiencia.

Lo que sí es una realidad es que las aplicaciones han llegado para transformar el ocio de las grandes ciudades y que sentirse solo ya no es una opción, o al menos existen más alternativas que nunca para combatirlo.