Salud mental

Aumentan un 15% los jóvenes con depresión

La pandemia, la hiperconectividad y las redes sociales son los principales factores de riesgo

Mujer con depresión
En el último año se han puesto en marcha equipos de prevención del suicidioDreamstime

En los últimos tres años, el porcentaje de jóvenes que han acudido a tratamiento y que han presentado depresión se ha incrementado en un 15%, según datos de Proyecto Hombre Madrid. El impacto de la pandemia, provocada por la Covid-19, ha sido uno de los principales motivos. «Esta etapa ha dejado secuelas en algunas personas que han terminado desembocando en algún tipo de trastorno depresivo, de ahí el aumento de la demanda», asegura Pablo Llamas, psicólogo de la asociación. Algo que corrobora Mercedes Navío, Coordinadora de la Oficina Regional de Salud Mental y Adicciones de la Comunidad de Madrid, quién no califica la pandemia de causante sino de «catalizador» en ese incremento de los factores de riesgo y señala un incremento en los llamados trastornos adaptativos. «No se ha visto incrementada la prevalencia de depresión, como trastorno de depresión mayor, pero sí en la sintomatología depresiva nerviosa en el contexto de afrontamiento del estrés». Las situaciones de incertidumbre y estrés, superiores a lo habitual en esta etapa, ha incrementado estos factores de riesgo especialmente en las personas más vulnerables. En la población joven se ha manifestado a través de sintomatología ansiosa acompañada de trastornos conductuales. «Ha crecido porcentualmente el trastorno de conducta alimentaria y ha habido un incremento en autolesiones, como formas no adaptativas de intentar calmar ese estrés».

Los más jóvenes deben hacer frente a otros factores como las propias características de esa etapa evolutiva: «es un momento de cambios, de aprender a afrontar cosas, sin herramientas...hace más vulnerables a esa parte de la población. De ahí que la mitad de los trastornos de salud mental empiecen a aparecer durante esta etapa». En tercer lugar, la hiperconectividad existente que hace el mundo más demandante. «Lo que antes se gestionaba con 17 años, ahora se exige que lo hagan a los 12 debido a los continuos estímulos e ideas que los jóvenes no dejan de recibir y para las que deben ser capaces de discernir lo que les sirve y lo que no», explica. Es decir, estos deben estar dotados de habilidades de pensamiento crítico, de habilidades de relaciones, empáticas o de gestión emocional mucho antes de lo que a otras generaciones les ha tocado hacerlo. «Esto también pasa con las redes sociales, tienen cosas muy positivas pero también unos riesgos que se están notando en este sentido, cada vez hay más chicos y chicas que se les hace un poco bola y no sabes gestionarlo, apunta Llamas.

La depresión puede convertirse en un grave problema de salud, sobre todo cuando es recurrente aunque sea de intensidad moderada. Puede causar gran sufrimiento y alterar la actividad escolar y familiar de la persona afectada, y en el peor de los casos, puede derivar en otros trastornos tan graves como la ideación suicida o conducta suicida, así como incrementar la probabilidad de consumir sustancias. En la Comunidad de Madrid llevan trabajando una década para erradicar el suicidio. En diciembre de 2022 pusieron en marcha un plan autonómico de prevención en el que están presentes todas las consejerías y trabajan de forma conjunta con todos los agentes sociales. «Se trata de un fenómeno complejo y multifactorial que requiere de la participación de educación, sanidad, servicios sociales... son claves para trasladas un mensaje de esperanza y de que el suicidio es algo prevenible y evitable», señala Navío. En el último año se han puesto en marcha 21 equipos de prevención en los hospitales madrileños y los últimos datos presentados por el Instituto Nacional de Estadística arrojaban un incremento en el número de suicidios en España y situaban la capital como la comunidad con la tasa de suicidio más baja. «No es algo que nos tranquilice, nuestro objetivo es reducir las tasas y lograr evitarlo por completo».

Con motivo del Día mundial de la lucha contra la depresión, Proyecto Hombre Madrid reivindica la importancia de pedir ayuda cuando sea necesario para poder realizar una intervención temprana que permita reducir el sufrimiento y evitar una mayor cronicidad o malestar en los jóvenes. «A veces no es tan fácil de detectar, no ocurre de la noche a la mañana, es un proceso en el que ocurren cosas, empieza a aparecer un estado de ánimo más triste», apunta Llamas. Los expertos hacen especial hincapié en un síntoma denominado «anhedonia», conocido por la incapacidad de sentir placer por cosas que antes lo producían. «Es algo que se manifiesta en la edad adulta y en la adolescencia. De esta última etapa, es importante rescatar también la irritabilidad. Los jóvenes deprimidos son hostiles de forma extrema con su entorno, el problema es que a veces se confunde con la rebeldía propia de la edad». El incremento de la actividad motora, si se muestran tristes o tienen episodios de llanto con frecuencia, si muestran falta de energía o cansancio constante, si tienden a aislarse socialmente, si tiene baja autoestima, habla de sí mismo de manera despectiva o expresa culpabilidad, son otros de los síntomas habituales.

La inversión realizada por las administraciones en los últimos años, así como la creación de números de ayuda como el 024 (para atender emergencias) son esenciales. No obstante, un abordaje terapéutico temprano evitará las situaciones límite. Si bien es cierto que la conciencia en la sociedad sobre esta problemática ha aumentado , se debe seguir trabajando para reducir las estadísticas actuales y con el estigma.