Sanidad

Cassandra: una prueba piloto en Madrid para diagnosticar el cáncer de pulmón

Madrid se suma a este proyecto de cribado para enfermedades relacionadas con el tabaquismo

Fátima Matute, en la presentación del proyecto Cassandra
Fátima Matute, en la presentación del proyecto CassandraComunidad de Madrid

La Comunidad de Madrid contará con la ayuda de Cassandra. Un nombre femenino que abrevia lo que en español podría traducirse como «detección de cáncer, dejar de fumar y evaluación respiratoria». Efectivamente, este proyecto piloto, liderado por la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), supone en esencia un cribado no solo del cáncer de pulmón, sino de otras afecciones vinculadas al consumo de tabaco.

Con una implantación de unos cuarenta hospitales de toda España, Cassandra empleará la tomografía computerizada con baja dosis de radiación. Pero la prueba se producirá en combinación con otro importante objetivo: la deshabituación del tabaco, así como con la colaboración del primer nivel asistencial de la sanidad pública. En total, se realizarán entre 30.000 y 50.000 pruebas diagnósticas en cinco años, de las que entre 1.000 y 1.500 corresponderán a la Comunidad de Madrid.

«Esta importante iniciativa abarca también otras patologías como enfisema, EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), osteoporosis y calcio coronario elevado, que genera elevados riesgos cardiovasculares», afirmó la consejera de Sanidad, Fátima Matute, que presentó ayer el proyecto en vísperas de la celebración del Día Mundial contra esta patología.

La consejera recordó que Cassandra va asociado al objetivo de la deshabituación tabáquica, como factor preventivo de la aparición de las afecciones pulmonares, pero también de otras como el tumor de vejiga. Y es que, «en estos momentos, fumar sigue siendo la primera causa mundial de muertes y morbilidad evitables», apuntó la consejera.

Desde el Ejecutivo regional recuerdan que, en España, el cáncer de pulmón es el causante de la mayoría de fallecimientos de origen oncológico, con 23.000 casos al año. Y el 70 por ciento de ellos, diagnosticados en estadios avanzados. Unas cifras que obedecen a la falta de síntomas en sus fases iniciales.

Así, Matute ha reclamado al Gobierno de España que «implemente, tal y como recomienda la Unión Europea, este tipo de cribados como parte de la Estrategia Nacional de Cáncer, ya que aún no está incluido».

En paralelo, la Comunidad de Madrid, tal y como notificó el pasado mes de septiembre al Ministerio de Sanidad, iniciará otro estudio piloto para evaluar la factibilidad de implantar un programa propio de cribado para este tipo de enfermedad. Y es que, uno de sus pilares básicos será reforzar la prevención en la Atención Primaria y la cesación tabáquica. De esa forma, se espera generar conocimiento suficiente para una posible inclusión como prestación de la cartera básica de servicios en el Sistema Nacional de Salud. «Se trata, en definitiva, de mejorar la calidad de vida de la población y queremos ponerlo en marcha antes de que finalice 2024», avanzó la consejera. De hecho, recordó que la implantación de estos cribados constituye una recomendación de la Unión Europea.

Por su parte, el doctor Luis Miguel Seijo Maceiras, neumólogo, codirector del Proyecto Cassandra, destaca que esta iniciativa «representa una oportunidad única para poner en marcha un cribado centrado en el paciente, capaz de aumentar la supervivencia en el cáncer de pulmón, detectar otras enfermedades clave como la EPOC y las patologías cardiovasculares, y conseguir que los participantes que siguen fumando abandonen el consumo».

Con todo, hay otras iniciativas dirigidas a facilitar la prevención y detección precoz que cuentan con apoyo de la Consejería. Es el caso de Prevecolón: kits de diagnóstico de cáncer de colon que los madrileños, tal y como planea la Consejería, podrán recibir en las farmacias, ya en este próximo 2024. Del mismo modo, continuará la implantación de Cervicam, prueba centrada en el diagnóstico de tumor de cuello uterino.