Historia

El desconcertante viaje del príncipe de Gales a Madrid en 1623 (y III)

En Campillo se despidió definitivamente del rey y el príncipe. La partida fue honorable

Llegada del Príncipe de Gales al Alcázar de Madrid
Llegada del Príncipe de Gales al Alcázar de MadridLa Razón

Frustrados los planes por los que se empezó a hacer aquel viaje de incógnito, el príncipe de Gales decidió tomar las de Villadiego con el rabo entre las piernas…

Así, Carlos Estuardo anuncia a su padre Jacobo VI que se vuelve a Londres a besarle las manos.

La estancia de Carlos Estuardo había ido transcurriendo entre homenajes y fiestas en su honor: cuando correspondió, las procesiones de disciplinantes; luego, corridas de toros lidiadas con aquella destreza y delicadeza del siglo XVII, ponderadas por Quevedo (un día se mataron 24 toros); si no, fastuosísimos y áulicos juegos de cañas (versificados también por Quevedo); cacerías en El Pardo y también en las «casas de placer de su Majestad», o sea, los sitios reales de los alrededores de la Corte… y la pléyade de poetas que describieron y escribieron sobre todo lo que tuvo que ver con esta visita.

En fin: el 8 de septiembre acudió Carlos a despedirse de la reina y de la infanta. Por la tarde se presentaron en público Felipe IV y Carlos Estuardo, el cual vestía de negro. El 9 de septiembre de 1623 partieron de Madrid hacia Londres el Príncipe de Gales y Buckingham. Al principio acompañaron a Felipe IV a El Escorial. Se entretuvieron unos días en el monasterio y en sus anejos, en donde cazaron.

En Campillo se despidieron definitivamente el rey y el príncipe y por Guadarrama cruzaron hacia Valsaín y Segovia. Es verdad. La partida fue honorable No hubo rencor.

De Segovia a Valladolid, y de ahí a Carrión de los Condes en donde le hicieron visitar a una visionaria la madre Luisa, la Monja de las Llagas, que incluso levitó ante Carlos Estuardo. Concluido el circo, pasaron a Santander. Allí una escuadra inglesa lo trasladó a Inglaterra. Lástima que en esos navíos faltaba una doncella para la que se habían preparado las mejores galas e ilusiones. El 25 de septiembre se embarcó y largaron amarras.

Es posible que no hubiera habido rencor cuando se fue Carlos Estuardo de Madrid (¿?), pero en 1625 una flota inglesa intentó asaltar Cádiz y fue rechazada. El acto de guerra lo inmortalizó Zurbarán.

Carlos Estuardo contrajo matrimonio en 1625 con Enriqueta María, la hija de Luis XIII de Francia y de Ana de Austria, nieta, pues, de Felipe III y sobrina de Felipe IV.

Carlos Estuardo, ya Carlos I de Inglaterra y de Escocia murió decapitado por los parlamentarios el 30 de enero de 1649 durante Revolución inglesa.

María Ana contrajo matrimonio en 1631 con Fernando III de Austria (1608-1657), rey de Hungría y Bohemia y más tarde Emperador (1637).

La relaciones del acontecimiento, así como la bibliografía, son abundantes.