El día después del caos en Barajas: las excusas y las "disculpas" del Gobierno

La tranquilidad reinó el día de hoy en Barajas, después de una jornada caótica, con miles de pasajeros que vieron cómo sus aviones despegaban sin ellos debido a las colas kilométricas en el control de pasaportes.

Ayer era el día de ofrecer explicaciones. Entre ellas, la del delegado del Gobierno en la Comunidad de Madrid, Francisco Martín, que señaló que las incidencias registradas fueron fruto de un "incremento muy significativo" en el número de vuelos, que coincidió también con un "fallo informático" y obligó a reforzar los sistemas de control de pasaportes.

"Se dio una situación puntual fruto de un incremento muy significativo en el número de vuelos, que tuvo que ser adecuado a la gestión por parte de la Policía Nacional del control de pasaportes que la ley obliga", ha explicado Martín en declaraciones a los medios tras guardar un minuto de silencio frente a la sede de la Delegación del Gobierno.

Además, el delegado ha reconocido que "un fallo informático dificultó más las operaciones", y ha asegurado que, a este respecto, "se han tomado medidas para reforzar esa coordinación" y evitar que problemas similares vuelvan a repetirse en el futuro. "Lamentamos los problemas que todos vimos ayer, pero creo que hoy y en los próximos días la situación volverá a la normalidad", ha subrayado.

En cuanto a la dotación policial en el aeropuerto, ha afirmado que el miércoles "hubo policía en todo momento", con 16 cabinas abiertas y dos agentes por cada una, si bien ha anunciado que se procederá a un refuerzo de efectivos con el fin de "agilizar" los controles y que la respuesta pueda ser "todavía mejor de la que habitualmente es".

Por su parte, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, pidió jueves disculpas a los pasajeros que ayer resultaron afectados por las largas colas en el control de pasaportes, asegurando que se contó en todo momento con la plantilla adecuada y con todas las cabinas funcionando.

"Hay momentos concretos de picos de vuelos que determinan unas pequeñas o grandes disfunciones, pero nosotros estamos trabajando y hemos dimensionado adecuadamente los puestos de control de pasaportes y documentación", ha declarado el ministro.

El ministro, quien ha asegurado que no quiere entrar en ningún tipo de controversia sobre este asunto, ha insistido en que ayer, como siempre, todos los puestos de control estaban abiertos y dimensionados con plantilla "conforme a las necesidades".

Y ha añadido que hoy "ha vuelto a ser lo que debe ser", en perfecto funcionamiento. Por otra parte, ha defendido la labor del ministro de Transportes, Óscar Puente, y de todo su equipo que está "absolutamente dedicado" a prestar el mejor servicio a los viajeros en coordinación con todos los ministerios, informa Ep.