Gastronomía

Llega Rhudo Madrid: la cocina de Paco Roncero se pone divertida

Fue durante la sobremesa, en una comida en su restaurante "El Casino", donde dos futbolistas y dos actores llegaron junto a él a este proyecto

De izquierda a derecha, Paco Roncero, Álex González, Marcos Llorente, Miguel Ángel Silvestre y Antoine Griezmann
De izquierda a derecha, Paco Roncero, Álex González, Marcos Llorente, Miguel Ángel Silvestre y Antoine GriezmannCedida

De las sobremesas, ese momento tan netamente español, inédito en otros países, han surgido grandes cosas. Una de ellas, por ejemplo, es nuestra Constitución, alumbrada en medio de las digestiones de croquetas y guisos de Casa Manolo. Fue también después de un buen homenaje, en este caso en el restaurante de Paco Roncero de El Casino, donde se plantó el germen de uno de los proyectos más esperados del gastropanorama madrileño. Allí se dieron cita dos actores (y guapos oficiales) y dos excelsos futbolistas (también muy apuestos). Se trataba, respectivamente, de Miguel Ángel Silvestre y Álex González, por un lado, y el jugador de la selección española Marcos Llorente y el campeón mundial Antoine Griezmann, por otro. Acabaron juntos, con el chef, compartiendo mesa. Y juntos idearon un proyecto, como socios, que acaba de hacerse realidad y abrir sus puertas al gran público. Se trata de Rhudo Madrid, que ofrece una faceta poco conocida del chef Paco Roncero. Aquí aboga por fusionar la cocina mediterránea y la latina para crear una carta muy diferente a su tradicional estilo vanguardista, muy sabrosa, fresca e ideal para compartir.

Y todo ello, por supuesto, en pleno corazón del barrio de Salamanca, en un local grandilocuente con una fuerte apuesta por el diseño. Pero que quede claro: estamos ante un proyecto gastronómico, avalado por un dos estrellas Michelin que ha sabido, con buen criterio, crear un concepto más democrático de su cocina sin caer en el efecto ‘cartas clónicas’ tan del Madrid de hoy. En concreto, el madrileño une la cocina mediterránea con la de países que conoce bien, como México, Venezuela y Colombia; no nos olvidemos que en esta bellísima nación ejerció como juez en Master Chef y Bake Off durante varios años. Roncero ha cogido estas bases para crear platos muy pensados para poner al centro, con colorido, opulencia, salsas y aliños de alma viajera, y que enriquecen un producto de calidad.

Los amantes de los crudos están de enhorabuena, pues aquí hay raw bar para dar y tomar. Además de ostras (con aliños tan apetecibles como el de leche de tigre con corazones de palma o la mignonette de fruta de la pasión), no faltarán carpaccios (ojo al de pulpo con ensalada griega de berenjena y queso feta) y varios ceviches sabrosones. En una época de bienaventurado protagonismo de lo vegetal, Roncero nos trae alternativas originales, como una lechuga a la brasa con pipián de menta o cogollos con melocotón. Y, por supuesto, mucha brasa y fuego en carnes y pescados.

la boloñesa de marisco con bogavante, que promete ser uno de los platos preferidos del público
la boloñesa de marisco con bogavante, que promete ser uno de los platos preferidos del públicoCEDIDA

Prueba de esta ambición es la solidez de su equipo. Como jefe de sala está Bruno Serenelli; a cargo de la bodega, el sumiller italiano Angelo Casali (ambos procedentes de Lío Ibiza). La cava se compone de más de 500 referencias, entre las que no faltan sugerencias de los socios colchoneros, Llorente y Griezmann; amantes del vino, han aportado a la carta algunos de sus favoritos, tales como Castillo Ygay Gran Reserva Especial 2012, diferentes añadas de Vega Sicilia Único o iconos de Château. Y para los cócteles, un primer espada como Miguel Pastor, que ha ideado tragos en la misma línea de la oferta culinaria, perfectos para maridar.

Al llegar la medianoche, Rhudo mudará su piel para convertirse en un referente del mejor ocio nocturno de la capital. Aspira a ser ese lugar para «ver y ser vistos», con un ambiente divertido y animado. No faltarán buenos sets de DJ y sorpresas para que la noche confunda a aquellos que lo desean.