Sucesos

Más de 1.000 policías para frenar la violencia en Madrid

Ayuntamiento y Comunidad piden al Gobierno que frene las limitaciones que les impiden poner más agentes en las calles

Dos agentes de Policía Nacional en las inmediaciones de la discoteca ‘Caña Brava’, a 3 de octubre de 2022, en Madrid (España). Un joven de 21 años ha fallecido y cuatro personas han resultado heridas en la madrugada de este lunes tras un tiroteo en una discoteca en Fuenlabrada. El fallecido tenía una herida por arma de fuego y una herida incisa en la cabeza. Además, el SUMMA 112 también ha atendido a un joven de 31 años por herida de arma de fuego en un hombro y le ha trasladado con carácter moderado al Hospital Doce de Octubre, además de atender a otros dos jóvenes. La Policía Nacional se encuentra investigando lo sucedido.03 OCTUBRE 2022;TIROTEO;DISCOTECA;OCIO NOCTURNO;JOVENES;FALLECIMIENTO;CAÑA BRAVAA. Pérez Meca / Europa Press03/10/2022
Dos agentes de Policía Nacional, custodian la escena de un tiroteo en FuenlabradaA. Pérez MecaEuropa Press

La ola de violencia no cesa en la capital. Hace diez días, en estas mismas páginas, LA RAZÓN alertaba de un final de julio y un principio de agosto especialmente intensos en lo que se refería a delitos violentos. Reyertas, venganzas, ajustes de cuentas o disputas personales habían provocado, en menos de dos meses, más de media docena de agresiones que habían dejado en torno a veinte heridos de diversa consideración. Desgraciadamente, tampoco puede decirse que las dos últimas semanas hayan sido una balsa de aceite en ese sentido, ni en la ciudad de Madrid ni en los alrededores. Ayuntamiento y Comunidad de Madrid han hecho esta semana idéntico llamamiento: la ciudad necesita más policías, a la espera de ver quién ocupará finalmente la cartera de Interior en el Gobierno de España.

El pasado domingo, un hombre y a una mujer agredieron con un machete a un joven de 33 años, tras una discusión en plena calle Marcelo Usera. Según apunta la investigación, la pelea estuvo motivada por una infidelidad. El ataque ocasionó heridas a la víctimas en cabeza, espalda, brazo y pierna, si bien la más grave de todas fue la amputación del primer dedo de una de sus manos. A pesar de que los agresores huyeron, fueron detenidos dos días después por la Policía Nacional en la localidad de Parla.

Sin salir del mismo distrito, el pasado miércoles, un hombre de 44 años fue herido por lo que se sospechaba al principio que era un disparo en la cabeza, mientras se encontraba en un restaurante situado en la calle Dolores Barranco. Pocas horas después, fue detenido el presunto autor de los hechos: un varón de 43 años, y de origen asiático como la víctima, que habría utilizado para su ataque un “bolígrafo pistola” del calibre 42, tipificado como arma de fuego, si bien se lo clavó en la cabeza. La discusión se produjo en la segunda planta del local, donde se encuentra un salón de juego.

Por último, en ese mismo día, durante la madrugada, un joven de 28 años fue apuñalado en el barrio de Malasaña mientras paseaba por la calle con un amigo. Los hechos ocurrieron sobre las 4:15 horas cuando un hombre, de 54 años, toxicómano habitual de la zona, abordó a dos jóvenes para pedirles dinero. Al negarse, el individuo comenzó a increparles, amenazándoles con una navaja para que les dieran sus pertenencias. Tras resistirse, el agresor propinó a uno de ellos un navajazo en el abdomen. Después de huir, el herido se derrumbó en la confluencia de la calle San Bernardo con Daoiz. Gracias a la descripción que aportaron las víctimas, los agentes lograron detener al ladrón, que cuenta con varios antecedentes por atentado a la autoridad y lesiones.

Tres ataques en poco más de tres días. Y en todos ellos, la presencia de armas blancas. Si bien el Consistorio presidido por José Luis Martínez-Almeida ha puesto en las calles más de 400 agentes desde que inició su mandato en Cibeles, el Ayuntamiento considera, a tenor de las últimas cifras y noticias, que debe acometerse un esfuerzo a nivel nacional. Así lo requirió esta semana la vicealcaldesa y concejala de Seguridad y Emergencias, Inmaculada Sanz, que reconoció el repunte de delitos durante este verano, y que pidió al Gobierno central que les dejen contratar más agentes municipales a través de un cambio en la tasa de reposición, medida que actualmente supone una limitación. “Llevamos mucho tiempo diciendo que Madrid necesita más policía, necesitamos más Policía Municipal, tenemos un déficit estructural de más de mil agentes en nuestra plantilla. Lo venimos denunciando desde hace cuatro años que entramos en el Gobierno. Lamentablemente no hemos tenido ningún tipo de respuesta positiva por parte del Gobierno de España para que podamos incorporar ese número de policías que esta ciudad necesita”, defiende la vicealcaldesa.

Si bien Madrid es "una de las capitales mundiales más seguras del mundo, y así lo reflejan todos los datos y todos los rankings, efectivamente está habiendo problemas de repuntes de esos hechos delictivos que tienen que ver con armas blancas y, por lo tanto, es algo a lo que hay que atender".

Desde el Consistorio recuerdan que la “competencia principal” en materia de seguridad ciudadana está en manos de la Delegación del Gobierno y Policía Nacional. “Nuestra Policía Municipal, con sus labores de ayuda a esas labores de seguridad ciudadana, vamos a seguir haciendo todos los esfuerzos", añadió.

En 2020, y en el marco de los Acuerdos de la Villa adoptados por todos los grupos municipales del Ayuntamiento (el PSOE entre ellos), uno de los objetivos era el incremento de los efectivos en cinco años, hasta llegar a los 1.700 de bomberos y los 7.000 de Policía. Para lograrlo, se hacía imprescindible que el Gobierno central eliminara la tasa de reposición, marcada en el 115% en lo que respecta a policías locales. Sin embargo, y más de tres años después, el Ejecutivo socialista no ha cambiado ni una coma al respecto.

Por su parte, el consejero de Medio Ambiente e Interior de la Comunidad de Madrid, Carlos Novillo, ha hecho referencia al último balance de criminalidad publicado por el Ministerio del Interior, perteneciente al primer semestre. Las cifras reflejaban un aumento del 1% en la comisión de delitos. “Entendemos que en Madrid se intentan limitar esos números por el esfuerzo que están haciendo las policías locales apoyando a las Fuerzas y Cuerpos de seguridad del Estado", afirmó Novillo. Sin embargo, el Gobierno regional se muestra “preocupado” por el repunte. Motivo por el cual ha pedido al delegado del Gobierno, Francisco Martín, que mantenga las plantillas policías, ante “incrementos en tipos delictivos muy preocupantes como las violaciones o las reyertas con el uso de navajas o armas de fuego". “Para la tranquilidad de todos los ciudadanos, la seguridad es un elemento esencial que debería estar en la primera línea de la discusión política y de la acción del gobierno", añadió.

El Cuerpo madrileño cuenta actualmente con 5.932 efectivos, lo que ha supuesto un incremento del 7,34 % de la plantilla. Con todo, una de las promesas electorales de Martínez-Almeida es el Plan Objetivo 10.000: el aumento, hasta esa cifra, de efectivos de Policía Municipal, Bomberos y SAMUR-Protección Civil, de modo que se puede alcanzar la «ratio recomendada por habitante». Así, la intención del Consistorio es la de incrementar especialmente su presencia en los distritos que cuentan con nuevos desarrollos urbanísticos y que, por tanto, están creciendo en mayor medida. Entre otros planes para la recién comenzada legislatura está también la elaboración de un plan estratégico de los servicios de seguridad y emergencias del Ayuntamiento que analice la situación, necesidades y propuestas de cada uno de los servicios, así como marcar los objetivos y medidas a implementar en cada uno de ellos.

En cuanto a problemas concretos, uno de los más acuciantes es el de las bandas juveniles, con una estrategia que se anunciará próximamente y que contará con el asesoramiento de la Policía Municipal, en colaboración con los servicios sociales del Ayuntamiento de Madrid. Parte de esas nuevas actuaciones se centrarán en los entornos escolares en los que estas bandas buscan captar nuevos miembros.

De acuerdo al Balance de Criminalidad de Interior, a lo largo de 2022, los robos con violencia se incrementaron un 5,9% en la capital, mientras que los robos con fuerza en los domicilios experimentaron una subida del 26%. Además, se produjeron 90.000 hurtos en la ciudad de Madrid durante el año pasado, siendo así una tipología que se ha incrementado un 25%. Por último, en la capital se consumaron 27 homicidios y asesinatos y se intentaron 83, lo que supone un aumento del 50% en estos delitos.