El oráculo del vino

Germán Blanco elabora vino como un acto de recuperación poética de familia, de territorios, y al final de uno mismo. Afortunadamente las historias de los modernos viñadores teje lo más auténtico de un panorama abigarrado, competitivo, pero que vive feliz gracias al impulso de aquéllos.

Germán con un amplio bagaje a sus espaldas, sintió el vacío emocional cuando desapareció su bisabuela Aurora, originaria de una pequeña localidad berciana, Las Ventas de Albares. Anduvo por esas viñedos que le fueron entregados como un homenaje y se convirtieron en su paleta de pintor. En ese microcosmos hay tintos como la evidente mencía, y otras blancas como la palomino o la godello entre otras. Todo se vendimia por la propia mano de este intérprete, que parece dirigida por la sabiduría acumulada de la vejez de aquellas cepas y trasciende a otra generación más.

Y al final, que es lo relevante, un vino de expresión delicada, con notas aromáticas, muy frutales, negras, intensas. Su boca envuelve y destaca su salinidad. Serio pero joven y no contaminado por los estereotipos ni nacionales o internacionales. Sin pretensiones con grandeza como un oráculo de esos viñedos abandonados, o «poulas».

Bodega: Casa Aurora.

Vino: Poula 2019.

D.O.: V.T. Castilla y León

Precio: 26 euros