Infraestructuras

El Teleférico de Madrid quiere volver a la vida

Es uno de los pocos teleféricos que tiene la maquinaria original aún en funcionamiento, fechada en 1968

Imagen del Teleférico de Madrid
Imagen del Teleférico de Madridlarazon

El Teleférico cumplirá en febrero un año cerrado mientras el Ayuntamiento de Madrid mantiene "un debate interno sobre su futuro", ha trasladado el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, en la comisión del ramo ante una pregunta de Más Madrid.

A sus 55 años de vida lo que está encima de la mesa es lo "conveniente y atractivo desde el punto de vista económico, turístico económico y de gestión" analizando "la mejor alternativa para tomar una decisión". "La vocación de este equipo de Gobierno es que pueda reabrir cuanto antes y en las mejores condiciones prestacionales, no sólo de comodidad sino esencialmente de seguridad", ha manifestado el delegado.

El concejal de Más Madrid Álvaro Fernández Heredia ha destacado que se trata de una instalación singular que requiere de cuidado y cuyo mantenimiento y conservación es muy complejo. "No deja de ser uno de los pocos teleféricos que tiene la maquinaria original aún en funcionamiento y que data de 1968. Incluso algunas de las intervenciones requieren fabricación ad hoc de las piezas", ha puntualizado el edil.

En el presupuesto de 2024 se incluye una previsión de cerca de 3 millones de euros para la renovación del Teleférico. En este punto, Más Madrid ha criticado "una cierta falta de planificación durante todo el año 2023" de una instalación que forma "parte del patrimonio industrial de este país y de esta ciudad" y, por ello, "hay que preservar".

Borja Carabante ha tendido la mano a la oposición para reflexionar sobre el futuro del Teleférico y les ha invitado a una reunión la próxima semana para analizar los pasos a dar. "Supone la renovación del cable, supone una inversión muy importante de 3 millones de euros y sólo por ese importe creo que merece la pena tomarnos un tiempo para tomar la decisión", ha argumentado.

"Tenemos que opinar y tomar decisiones para que esa ordenación que hagamos dentro del Bien de Interés Cultural sea la más adecuada para prestar los servicios", ha concluido.