Vinos de barra: Finca y voluntad, el tempranillo

La historia de los vinos desde luego es la de los bodegueros. No hay nada donde el factor humano tenga tanta importancia, para la elaboración de un ejemplar que sea fruto de la voluntad, del deseo de pertenencia a un territorio, y de defensa a ultranza del paisaje. Ignacio Figueroa es un acreditado bodeguero de la Ribera del Duero, y durante años ha explorado las posibilidades de tempranillo o la tinta fina siempre en clave de modernidad.

Manteca Fina se llama su nuevo proyecto con la complicidad de mucha gente que cree en la pericia técnica y emocional de Ignacio para conseguir vinos de memoria. Así, comprendiendo el viñedo que se encuentra en la encrucijada de territorios de esa larga denominación, y que arroja combinaciones para la alquimia, factura un tinto de matices, notas envolventes y auténtica coherencia.

Se presenta la fruta del viñedo bien escrutado, se van siguiendo los pasos de la buena enología, incluso se deja un sueño en roble también equilibrado. Todo es una obra hermosa y amable, de untuosidad gustosa, para soñar con un paseo por un viñedo, y por una manera de ver la vida muy propia de quien nos regala este tinto.

Bodega: Dominio de Salvatierra

Vino: Manteca Fina 2021

D.O.: Ribera del Duero

Precio: 18 euros

www.dominiodesalvatierra