Las viviendas públicas de Rivas: «Vivimos con bichos y humedades»

La Empresa Municipal de Vivienda (EMV) de Rivas cuenta con alrededor de 660 viviendas. A estas, hay que sumar otras 83 de protección pública. «Tenemos problemas gravísimos de humedades, convivimos con bichos en las casas. Hay pececillos de plata... Todo por la humedad», comenta una de las usuarias. Trasteros inutilizados, zonas comunes descuidadas, la parte exterior de la entrada llena de grietas... La lista de desperfectos se ensancha a medida que describen su día a día.

El PP de Rivas Vacimadrid, con su candidata Janette Novo al frente, denuncia la «mala gestión» de los recursos inmobiliarios del Ayuntamiento de la localidad, «con la consecuente repercusión en las arcas públicas del municipio» y el «abandono y dejadez al que se ven sometidos muchos de estos espacios».

Así, los «populares» recuerdan que los propietarios de viviendas vendidas en estas promociones de la EMV han reclamado en «reiteradas ocasiones» una solución para los desperfectos de sus inmuebles. En algunos casos, la ausencia de respuestas, o la tardanza en las mismas, ha provocado la judicialización de estos casos. Un hecho, apuntan desde el PP, «que lleva también a que se destine mucho dinero en esos procesos».

Precisamente, la EMV ripense no está en disposición de perder dinero. Al cierre de 2022, la entidad pública tiene arrendamientos inmobiliarios pendientes de cobro por valor de 6,2 millones de euros. Dichos arrendamientos están incluidos en concepto de deterioro porque la propia EMV los da por «incobrables». Por otro lado, la Agencia de Vivienda Social (AVS), perteneciente a la Comunidad de Madrid, ha reclamado a la entidad un total de 2,5 millones de euros. Una cantidad desembolsada por la AVS en calidad de «garante solidario» de la entidad ripense. Estos pagos se sumarían a una deuda superior a los 25 millones con entidades de crédito, que, unido a otros impagos, hacen un total de 48,8 millones de euros de adeudo.

Casas enmohecidas

Las fotografías adjuntas en este artículo serían una muestra de la «dejadez» por parte del Consistorio de Rivas hacia su patrimonio inmobiliario. En este caso, se trata de una serie de trasteros ofertados: paredes enmohecidas, varios elementos en estado de putrefacción... y, consecuentemente, los malos olores que ese mal estado lleva aparejados. De hecho, aseguran, es necesario llevar una mascarilla para soportar «mínimamente» el olor del lugar.

Un vecino describe también el estado de la situación de los garajes. Y más concretamente las tuberías, desde las cuales sale «el agua a chorros» debido a las frecuentes roturas. En algunos casos, la situación se arregla «tras mucho insistir». En otros, aún están esperando una respuesta.

Desde el PP de Rivas señalan uno de los puntos perjudicados: los aparcamientos situados en la calle Abogados de Atocha, próximos a la zona de Covibar. La semana pasada, amanecieron con un cartel informativo en el que se comunicaba a los vecinos que, en caso de que la plaza de aparcamiento de un titular se encuentre «afectada por el agua», aparquen sus vehículos en la calle Cuenca. Y es que, efectivamente, las inundaciones sufridas en los últimos tiempos han obligado a los vecinos a utilizar una bomba de presión para «achicar» el agua. Si bien las plazas vacías de estos aparcamientos no están en venta, durante años sí ha sido así. La baja rentabilidad, por deficiencias, que presentan estos espacios ha llevado a la EMV a plantearse su transformación en trasteros. Algo que no ha acabado de cuajar.

Varios vecinos de Rivas Vaciamadrid han mostrado los desperfectos que sufren a diario. Sin embargo, también han reflejado su «temor» a ser «identificados» en medios de comunicación y redes sociales. ¿La consecuencia temida? Que se les quite el piso de alquiler cuyo propietario es la EMV.

4.000 viviendas

Tal y como se indica en su web, la EMV de Rivas es una «entidad de carácter enteramente público» que gestiona las competencias municipales en materia de vivienda, «facilitando a los vecinos y vecinas de Rivas el acceso a este derecho fundamental». Así, señalan que, en los últimos años, han puesto en el mercado «cerca de 4.000 viviendas» y gestionan «un amplio patrimonio propio de viviendas en alquiler», entre las que incluyen viviendas privadas, plazas de aparcamiento, locales comerciales y oficinas en el edificio Atrio. Sin embargo, de acuerdo a la oposición y a los residentes de estas zonas, la pérdida de valor derivada del abandono supone un obstáculo, a día de hoy, muy difícil de franquear.

FE DE ERRORES

El pasado 17 de mayo, la sección de Madrid de LA RAZÓN publicó este artículo sobre el mal estado de las viviendas públicas de Rivas Vaciamadrid. En el mismo, incluíamos las opiniones de una usuaria, con nombre y apellido. Este periódico desconocía que dichas afirmaciones se realizaron en la privacidad de un grupo de Whatsapp y, por tanto, que la afectada no había dado autorización alguna para su uso, y menos aún para revelar su identidad. Nada más ponerse en contacto con este diario, su identidad fue retirada del presente artículo. Desde LA RAZÓN lamentamos profundamente lo ocurrido.