Yoga y silicio para la piel

Reparar la piel con silicio orgánico: Se debe tomar bebido, lo recomendable es durante un mes continuado y luego un período de descanso y vuelta al silicio. La carencia de silicio es mayor conforme avanza el proceso de envejecimiento, con el consiguiente impacto en huesos, cartílagos, peloyuñas… Hace medio siglo se descubrió que el silicio orgánico también es fundamental para prevenir la proliferación de arrugas, particularmente en el rostro. Al estimular el colágeno, evitamos la flacidez y, al tiempo, se incrementa exponencialmente la producción de elastina, con el consiguiente beneficio para la firmeza de nuestra piel.

Beneficios del Yoga facial: La metodología es muy asequible y los resultados son visibles inmediatamente, mejorando la calidad de la piel al relajar el rostro y el cuello. La técnica del yoga facial consiste en practicar distintas posturas con las que estimulamos los músculos, logrando un «efecto lifting»; además de inducir la producción de colágeno. Al principio, tendremos la dificultad de localizar los músculos de la cara que no es tarea fácil, por lo que lo más práctico es colocarnos delante de un espejo para ejercitarnos al principio.

Aceite de ravintsara contra los virus: Como todo aceite esencial, es el extracto más puro de una planta; en este caso del ravintsara, un árbol de Madagascar cuyas hojas tienen una reconocida actividad antiviral, antioxidante, antibacteriana y antiinflamatoria. Cuando inhalamos aceite esencial de ravintsara fortalecemos las defensas y ayudamos a combatir los virus, específicamente en las vías respiratorias. Con apenas unas gotas de este aceite esencial en el humificador reforzaremos el sistema inmune y limpiaremos el aire de nuestra vivienda.