¿Son todos los entornos de trabajo saludables?

Parece lógico pensar que un entorno de trabajo debe ser siempre saludable, no solo por el bienestar de los trabajadores, sino también por el de las propias empresas. ¿Por qué? Para empezar porque es lo correcto. Es una cuestión relacionada con la ética, y cuidar de otros. También porque es una acción inteligente de interés para las propias empresas: si consiguen crear y mantener un ambiente de trabajo saludable, conseguirán retener talento que fortalezca y haga crecer la compañía. Y, para terminar, porque es lo legal, es lo que marca la ley.

¡Qué importante es trabajar en una empresa que te cuide! Ecoembes es un ejemplo de ello, cuidando de sus empleados como lo hace con el medioambiente, y apostando por su crecimiento y conciliación. ¿Te gustaría trabajar en una empresa así?

La evolución del concepto

En las últimas décadas, la definición de «entorno de trabajo saludable» ha evolucionado y experimentado numerosos cambios, ya que tradicionalmente, el término se asociada exclusivamente al ambiente físico de trabajo. En esa evolución, se han ido incorporando otros aspectos como los hábitos de salud, factores psicosociales y todo aquello que pueda tener efecto -mental, de bienestar o del tipo que sea- en la salud del trabajador.

De hecho, existe una definición de la Organización Mundial de la Salud (OMS) al respecto: Un entorno de trabajo saludable es aquel en el que los trabajadores y jefes colaboran en un proceso de mejora continua para promover y proteger la salud, seguridad y bienestar de los trabajadores y la sustentabilidad del ambiente de trabajo en base a los siguientes indicadores:

• La salud y la seguridad concernientes al espacio físico de trabajo.
• La salud, la seguridad y el bienestar concernientes al medio psicosocial del trabajo incluyendo la organización del mismo y la cultura del ambiente de trabajo.
• Los recursos de salud personales en el espacio de trabajo y
• Las formas en que la comunidad busca mejorar la salud de los trabajadores, sus familias y de otros miembros de la comunidad.

Con esto, se pone el foco en la prevención primaria, evitando -o tratando de hacerlo- que se sucedan accidentes o enfermedades. Un buen entorno laboral es fundamental para favorecer la seguridad, salud mental y bienestar de los trabajadores.

¿Cómo podemos generar ese entorno saludable?

No existe una regla o un camino único para llegar a este objetivo, pero sí que se deben tener en cuenta una serie de parámetros para lograr cumplir con las expectativas de todos los involucrados, y, sobre todo, para que sea un programa duradero en el tiempo.

Esto implica un ambiente físico seguro; ambiente psicosocial, en referencia a un trabajo organizado, con distribuciones de carga de trabajo asumibles y la jerarquía bien establecida; recursos personales de salud y; participación de la empresa con la comunidad, mostrando compromiso real por la sociedad y por el cuidado del medioambiente en pro de una economía sostenible.

Comprometidos con la sociedad

Buen ejemplo de ello es Ecoembes, una compañía que lleva en su ADN el compromiso con el medioambiente, y en consonancia, con las personas que forman parte de la organización.

Por eso, trabajan por el bienestar de sus trabajadores, poniendo a su disposición herramientas para su desempeño profesional, activando planes de igualdad y conciliación, y en general, utilizando todas las herramientas que la compañía tiene a su alcance para crear ese entorno laboral tan deseado.