Sección patrocinada por sección patrocinada

Medioambiente

La Eurocámara respalda la Ley de Restauración de la Naturaleza

A tan solo 100 días de los comicios, el Parlamento Europeo saca adelante la nueva norma que busca cumplir un mayor compromiso con el medioambiente, frente a los recelos del sector agrícola

La Eurocámara respalda la Ley de Restauración de la Naturaleza
La Eurocámara respalda la Ley de Restauración de la NaturalezaUnsplash - Guillaume Perigaus

329 votos a favor, 275 en contra y 24 abstenciones: así ha quedado la composición de la Eurocámara que el pasado 27 de febrero aprobaba la Ley de Restauración de la Naturaleza, que busca reparar los ecosistemas dañados y degradados de la Unión Europea.

Con ella, los Estados miembro ampliarán las medidas de conservación que ya tenían las zonas pertenecientes a la Red Natura 2000, que serán las primeras en ser tratadas. Además, adoptarán obligaciones de restauración encaminadas, al menos, al 20% de las zonas terrestres y del 20% de las marinas, de aquí a 2030. Los planes nacionales deberán estar vigentes antes de 2050 y contarán con la colaboración de las comunidades locales y de la ciudadanía.

De acuerdo con la comisión, será “una contribución clave para alcanzar la neutralidad climática de aquí a 2050 y aumentar la preparación y la resiliencia de Europa frente a los efectos del cambio climático”.

En un contexto difícil, pero con el respaldo de la ciencia

La ley, que ahora tendrá que pasar por el Consejo de la Unión Europea, sale adelante en un contexto de agitación por parte del sector agrícola, con las revueltas que han tenido lugar en varias ciudades del continente.

Es por ello que el Partido Popular Europeo -en mayoría parlamentaria, en la actualidad- pedía a sus diputados votar en contra, junto a los euroescépticos Conservadores y Reformistas Europeos y a la extrema derecha de Identidad y Democracia, quienes, además, presentaron una moción para parar la norma.

Sin embargo, fueron varios los eurodiputados de estos grupos que anunciaron que votarían positivamente a la ley, la cual salió adelante con una amplia mayoría.

Y es que la ley cuenta con un respaldo y un consenso científico que ha convencido al Europarlamento y que, además, entronca con los acuerdos sobre biodiversidad de las Naciones Unidas y las peticiones de las principales organizaciones medioambientales.