Un grupo de ingenieros logra producir hidrógeno verde con desechos

Hoy en día, la generación de hidrógeno puro es un método muy costoso que requiere de grandes cantidades de energía.

Se logra a través de un proceso de electrólisis que emplea una descarga eléctrica para dividir el agua en oxígeno e hidrógeno. La energía necesaria para lanzar esta descarga normalmente es obtenida mediante recursos fósiles como el carbón o el gas natural.

O así era hasta ahora.

La Universidad de Illinois Chicago ha presentado en un artículo de Cell Reports Physical Science un innovador método para obtener gas hidrógeno a partir de desechos agrícolas como cáscaras o estiércol, empleando únicamente energía solar y agua.

Este equipo de ingenieros ha conseguido descartar estos combustibles fósiles necesarios para la electrólisis y los han reemplazado con una biomasa procedente de desechos, como cáscaras de caña de azúcar, residuos de cáñamo, residuos de papel y estiércol de vaca. Este último, además, ha demostrado ser el más eficaz.

Mezclándola con ácido sulfúrico, han conseguido producir biocarbón, una sustancia rica en carbono que reduce la energía necesaria para producir la descarga de la electrólisis en un 600%, dejándola en una fracción de voltio.

La reacción genera dióxido de carbono que, según este equipo universitario, también podría reutilizarse para carbonatar bebidas refrescantes o convertirse en etileno o en algún otro químico para la fabricación de plásticos.

De este modo, y al capturar este subproducto y aprovechar fuentes de energía renovables, como la solar, este proceso podría reducir su impacto medioambiental a cero.

Mirando hacia el futuro

El hidrógeno es el elemento más abundante en la Tierra, en combinación con otros elementos químicos. También se trata de un elemento clave en la carrera por descarbonizar nuestra economía, gracias al hidrógeno verde, un combustible ligero, potente y producido de forma renovable.

Por eso, ya se han solicitado patentes y el equipo de UIC planea testear este método en escalas más grandes.