Inteligencia artificial en la ganadería

¿Puede la tecnología reducir el impacto ambiental de la ganadería extensiva? Eso es lo que se propone Airegan, un proyecto impulsado por la compañía Digitanimal, la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) y la Universidad de Córdoba para calcular la huella de carbono de estas explotaciones mediante el uso de dispositivo sI o T( internet de las cosas), imágenes de satélite, técnicas de inteligencia artificial y machine learning.

El primer paso para esta iniciativa, que se desarrollará hasta mayo de 2024, será la creación de un modelo para estimar las emisiones generadas por el ganado, a partir de criterios como el peso, el estado reproductivo, el tipo de alimentación o el manejo del pastoreo. Para mejorar su precisión, este modelo se alimentará de otros datos como los recogidos por los collares GPS.

También se recolectarán muestras de suelo en un mínimo de 50 fincas en toda España para determinar el carbono orgánico (directamente relacionado con el secuestro de carbono en las zonas ganaderas) y otros indicadores sobre fertilidad y calidad. Estos datos servirán para desarrollar algoritmos de IA que, junto con otras fuentes (imágenes de satélite, estaciones meteorológicas …), permitirán estimar el secuestro de carbono y los distintos parámetros del suelo sin necesidad de muestreo frecuente.

Finalmente, se calculará la huella de carbono en cada ganadería y se harán recomendaciones a los ganaderos para reducir su impacto ambiental, por ejemplo, en cuanto a las temporadas de pastoreo, las áreas de pasto ola tasa departo sen hembras reproductoras. Tecnología con beneficios no solo ambientales sino también para la mejora de la eficiencia, la productividad y la rentabilidad de las explotaciones ganaderas, como defienden sus promotores, que también destacan su contribución a la hora de cumplir con las nuevas normativas sobre sostenibilidad.