DS7 Crossback E-Tense 4x4, un híbrido enchufable con tecnología ganadora

DS acaba de incorporar a su aún exiguo catálogo su primer híbrido enchufable, el DS7 Crossback E-TENSE 4x4, una opción en la lógica de la marca, que nacía en 2014 con la evidente intención de electrificarse rápidamente, como ya lo ha demostrado en todas las temporadas de la Formula E, que actualmente lidera siendo campeona de pilotos y marcas.

Esta nueva opción, estratégica para la marca y el grupo PSA, al que pertenece, por su impacto en la reducción de emisiones, llega a los concesionarios con un precio de entrada, sin descuentos, de 50.450 euros, para la inspiración Be Chic, y un máximo de 55.800 para la Grand Chic.

Los argumentos de este amigable DS7 son la tracción cuatro y la tecnología de hibridación, dotada de dos máquinas eléctricas, una en cada eje, con potencias de 110 y 112 caballos, respectivamente, alimentadas por una batería de 13,2 kWh, un motor de gasolina de 200 CV de potencia, para una entrega final de 300 CV y un par motor de 520 Nm, dos cifras que se traducen en una fulgurante respuesta en aceleración y recuperaciones.

El sistema, asociado a la transmisión e-EAT8 de ocho velocidades, permite un funcionamiento cien por cien eléctrico durante 58 kilómetros, según el ciclo de homologación WLTP, más exigente que el NDEC hasta ahora vigente, a una velocidad de hasta 135 km/h dato que desmarca a este DS de sus competidores, que generalmente homologan entre 40 y 50 kilómetros.

Y con estos argumentos, el DS7 Crossback E-TENSE 4x4 dispone de la etiqueta de cero emisiones, gracias a esos 58 kilómetros en modo eléctrico, y homologa unas emisiones combinadas de CO2 de 30 g/km, también según el ciclo WLTP y un consumo medio de 1,3 litros de gasolina cada 100 kilómetros.

La batería se puede recargar en 8 horas en un enchufe doméstico de 1,8 kW, 4 horas si el enchufe es de 3,7 kW y en dos horas si es de 7,4 kW. La recarga de la batería también es posible con el sistema de frenada regenerativa en las fases de deceleración, aunque con mucha menos potencia.

El sistema híbrido del DS 7 ofrece cuatro modos de funcionamiento y, por lo tanto, de gestión de la energía, seleccionares manualmente. El eléctrico puro (zero emissions) que pone en acción los dos motores eléctricos, el deportivo (sport) que utiliza todos los motores, el híbrido (hybrid) que en cada momento utiliza la combinación más conveniente para el mínimo consumo; 4x4 (4WD), en el que el motor eléctrico trasero envía fuerza a las ruedas traseras, y E-Save, que permite conservar la carga de la batería.

Una función adicional también permite programar el porcentaje de batería a salvo de consumo para aquellos casos en los que entramos a las zonas urbanas restringidas, por ejemplo.

Con todo ello se abre para el conductor un universo nuevo, más que interesante en ese caso, porque en las primeras pruebas de conducción del híbrido de DS, realizadas en un escenario exigente como lo es el perfil montañoso del primero leridano

Sorpresa y satisfacción son expresiones que describen bien el resultado de esta primera evaluación. Sorpresa, porque el sistema es de funcionamiento refinado, y satisfacción, porque realmente es eficiente, con unos consumos bajos aún siendo un conjunto muy deportivo, como lo avala esos 6,1 segundos en pasar de 0 a 100 km/h.

El DS 7 E-Tense aguanta perfectamente los 300 CV de potencia del sistema y lo hace aún calzando neumáticos puros de invierno, como los de la gama Michelin Alpin calzados en las unidades de la presentación, en un ambiente de elevada temperatura para este tipo de gomas.

El DS7 Crossback E-TENSE 4x4, que tendrá más adelante una variante de dos ruedas motrices, comparte sistema híbrido con sus equivalentes en el grupo PSA, es decir, Citroën C5 Aircross Hybrid, Peugeot 3007 Hybrid4 y Opel Grandland X Hyubrid4, con unas prestaciones que la competencia en el mercado de gama alta no ofrece. El DS rinde elevadas prestaciones y precio ajustado, una combinación que sus competidores, por el momento, no han sido capaces de igualar.