Motor

Este año se venderán 500.000 coches menos en España

Se estima que el mercado se quedará en unas 700.000 unidades, lo que supone una bajada de aproximadamente el 40%

Economía/Motor.- Las ventas de coches en Italia suben un 2,17% en noviembre, con más de 150.500 unidades
Economía/Motor.- Las ventas de coches en Italia suben un 2,17% en noviembre, con más de 150.500 unidadeslarazonLAPRESSE/NICOLÒ CAMPO

Las previsiones de venta de automóviles en nuestro país durante el presente ejercicio serán de sólo unas 700.000 unidades, lo que supone un descenso de medio millón de vehículos respecto a las iniciales previsiones del sector, que estimaban que durante 2.020 podrían alcanzarse fácilmente los 1,2 millones de unidades. Esto supondrá fuertes pérdidas en toda la cadena de valor del sector del motor y un asimismo un fuerte descenso de los ingresos del Estado por los impuestos directos que genera cada coche nuevo vendido.

La totalidad de las asociaciones empresariales de la automoción, desde fabricantes e importadores a distribuidores y talleres, que se encuentran parados desde hace 40 días, han modificado sus previsiones macroeconómicas ya que las que si hicieron a principios de este año han quedado obsoletas dadas las circunstancias excepcionales actuales, empeoradas aún más al prolongarse el estado de alarma.

Entienden los analistas que la caída general de la economía española, del empleo y de la confianza de los consumidores a lo largo del año y posiblemente en años posteriores va a condicionar las ventas de automóviles, tanto turismos a particulares como vehículos comerciales. Por ello, han empeorado sus previsiones de mercado para cierre de año. Según las estimaciones de los empresarios el mercado va a caer entre un 40% y un 45% en el conjunto de 2020, con unos volúmenes cercanos a las 700.000 unidades. Este escenario ya tiene en cuenta un periodo de estado de alarma y confinamiento de dos meses, con una desescalada progresiva desde el mes de mayo, y una caída del PIB de entre el 5% y el 6%.

Entienden que los dos primeros trimestres posteriores a la finalización del estado de alarma serán duros en cuanto a las ventas de vehículos, por el incremento exponencial de la incertidumbre económica entre los consumidores, con tendencia a ir mejorando lentamente a partir del verano, siempre con cifras de comercializaciones muy por debajo de las registradas en 2019 y cercanas a las peores estadísticas de la crisis económica de hace una década.

“Es imprescindible tomar en cuenta la situación de especial debilidad en la que se encuentra el sector de la automoción, uno de los pilares de la economía española y el único sector industrial que lleva parado en seco más de un mes”, explicó José López-Tafall, director general de Anfac, la asociación que reúne a fabricantes e importadores, por lo que cree urgente y necesario “poner en marcha cuanto antes medidas de estímulo coyunturales a la demanda de vehículos, que acerquen las nuevas tecnologías, más eficientes y seguras, a los ciudadanos y evitar así que opten por vehículos de más de 15 años, con un impacto muy negativo tanto en términos medioambientales como de seguridad vial”.