Motor
Más de 20.000 comercios de coches usados pueden cerrar en las próximas semanas
Las caídas de ventas de marzo y abril han sido casi del 90% y las perspectivas del mercado no son optimistas
La falta de negocio durante más de un mes y medio por culpa del confinamiento decretado en el estado de alarma puede llevarse por delante a una gran parte de los comercios de coches de segunda mano. Asociación Nacional de Comerciantes de Vehículos (Ancove) ha calculado en más de 22.000 los establecimientos de compraventas que cerrarán sus puertas si no reciben ayudas urgentes. Y estas no van a llegar.
Las ventas de coches de VO tienen un paralelismo con las de coches nuevos. Pero los comercios de los modernos, los concesionarios de las marcas, suelen tener una mayor solvencia financiera que las tiendas de coches de segunda mano y muchas de ellas no podrán resistir el impacto de la crisis y descensos de más del 90% en sus cifras de negocio en el conjunto de los dos últimos meses. Y las expectativas de negocio en el futuro próximo no parecen optimistas dads la recesión económica que se avecina.
Ya marzo fue un mese de crisis, pues sólo funciono la venta de usados durante la primera quincena. En el tercer mes del año se realizaron trasferencias por un total de 124.329 unidades, lo que supuso un descenso del 39% sobre el mismo mes del año pasado. Aunque el año había comenzado en positivo, el balance del primer trimestre se cierra con un descenso del 10,9%. La situación del mes de abril va a ser mucho peor, ya que todos los establecimientos han tenido que permanecer cerrado y las operaciones “on line” han sido casi anecdóticas.
Como la mayoría de los comercios de compraventa son negocios familiares con muy poco poder financiero, la falta de recursos hace que este sea un sector muy vulnerable, pues prácticamente viven al día, adquiriendo unidades en función de los ingresos adquiridos con la venta de los anteriores. El paro decretado por el Gobierno está provocando un aumento del tiempo medio de venta de un vehículo, lo que ha generado un aumento del “stock” de coches que conlleva un sobrecoste financiero para los comerciantes.
Según estos pequeños y medianos empresarios, lo más importante para mantener su actividad sería poner en marcha un plan para el fomento de las ventas de coches nuevos lo antes posible. El mercado del automóvil es una cadena que une el vehículo nuevo y el vehículo usado. El uno sin el otro no tiene futuro. Los compradores de coches nuevos precisan un mercado para colocar su coche viejo, bien el achatarramiento si son vehículos muy antiguos, bien el mercado de ocasión.
Los compraventas son, por tanto, un eslabón fundamental en la cadena colocando con garantías los coches que aún pueden seguir circulando y cubren una clientela muy diversa que abarca personas con menor poder adquisitivo. Pero también son importantes para una gran mayoría de propietarios que aspiran a modelos de mayor gama a los que no pueden acceder de primera mano entregando su coche al mercado de VO.
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