Motor

Citroën ë-C4, un eléctrico ‘Made in Spain’ con vitola madrileña

Tiene un precio de 32.000 euros sin contar las ayudas públicas. La autonomía homologada por el “real” ciclo WLTP es de 350 kilómetros

Copyright William CROZES @ Continental Productions
Copyright William CROZES @ Continental ProductionsCitroenCitroën e C4

El sino de Citroën en la historia del automóvil es sorprender de cuando en cuando con sus cambios radicales en diseño, conceptos y tecnología, y este es uno de esos momentos con la puesta en escena del C4, un modelo heredero de una larga saga de berlinas de tamaño compacto, que en este caso llega con una más que interesante variante ë-C4 cien por cien eléctrica, con un precio sin ayudas a partir de 32.000 euros.

Citroën C4
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Y, además, el hito llega desde España y concretamente desde la veterana factoría de Villaverde, una instalación que ha pasado por momentos críticos, hasta plantearse su cierre, que con este estreno tiene garantizado su futuro, al menos a medio plazo, ya que la nueva generación C4 se fabrica para todo el mundo en esta fábrica del grupo PSA.

La nueva generación C4 está desarrollada sobre la nueva plataforma multienergía CMP, que permite, sin pérdidas de espacio ni alteraciones dinámicas, un C4 térmico o eléctrico. En comparación dinámica, la plataforma muestra una eficiencia similar entre cualquiera de las versiones térmicas del C4 y la eléctrica, a pesar de que los pesos varían notablemente con la necesidad de una potente y pesada batería para alimentar un motor eléctrico que pesa menos que el térmico.

Conceptualmente, el nuevo C4 es completamente diferente a lo ofrecido por Citroën hasta ahora, ya que ha materializado un mestizaje con los mejor de los exitosos SUV y las berlinas tradicionales de cinco puertas.

El resultado, consecuentemente, se ubica a medio camino entre una berlina y un todocamino, aunque prevalecen las cualidades crossover, como la altura libre al suelo (156 mm) y, por añadidura, una posición de conducción más elevada y el aspecto general, mientras su forma de desenvolverse sobre el asfalto es más cercana a la de las berlinas que a las de los SUV.

El nuevo C4 exhibe unas cotas de 4.360 mm de longitud, 1.800 mm de anchura y 1.525 mm de altura, con un frontal elevado y una firma lumínica en uve y en dos niveles, basada en la tecnología LED, en tanto la zona trasera, también dominada por nueva iluminación LED, es de tono deportivo de estilo coupé. El portón trasero esconde un maletero de 380 litros, también para la versión eléctrica.

La silueta es poderosa con marcadas líneas de carácter a lo largo en las cuatro esquinas de esta berlina, también caracterizada en todas las opciones motrices por el confort, el interior definido por asiento con mullido extra y el exterior por una amortiguación de doble efecto que absorbe excepcionalmente bien las irregularidades del terreno y proporciona una sensación de alfombra voladora. Al comportamiento de esta suspensión hay que adaptarse porque puede parecer excesivamente suelto en los apoyos. El chasis se asienta rápidamente en la línea de la curva, aunque se perciba lo contrario inicialmente.

Del confort forma parte la profusa tecnología útil, como así gusta denominarla la marca, utilizada en ayudas a la conducción, con una veintena de dispositivos, y en conectividad, con media docena de tecnologías. La presencia de tecnología es notoria a bordo, con un tablero completamente digital, delimitado por la pantalla del puesto de conducción, y la central, para el control del resto de los dispositivos.

Con esta identidad única, Citroën ha configurado la nueva generación del C4 con motores de gasolina de 100 a 155 caballos de potencia o diésel de 110 a 130 caballos, en asociación a trasmisiones manuales o la automática de 8 relaciones. Pero la estrella del nuevo C4 es la versión eléctrica, que supone la quinta etapa de la ofensiva eléctrica de la marca la propuesta más novedosa del C4 es su variante eléctrica.

El ë-C4 monta un motor de 136 caballos de potencia y 260 Nm de par motor disponible desde el arranque, alimentado por una batería de 50 kWh de capacidad, con la que la autonomía en ciclo WLTP de 350 kilómetros. La garantía de la batería es de 8 años o 160.000 kilómetros para el 70% de su capacidad de carga.

El funcionamiento es sencillo. El sistema se gobierna con una transmisión automática que dispone de una función Brake para incrementar la capacidad de recarga en las deceleraciones.

El ë-C4 es extraordinariamente eficiente en el entorno urbano, con paradas y arranques contantes y bajas velocidades de crucero, y muestra su peor cara en carretera, escenario en el que aumenta el consumo. De todas formas, se pueden conseguir autonomías reales alrededor de los 300 kilómetros con una conducción cuidadosa, pero normal.

La batería admite recargas rápidas, hasta el punto de lograr ritmos de 10 kilómetros por minuto, lo que permite llegar al 80% de la capacidad de la batería en 30 minutos. Y ya dependiendo de la potencia de la toma, la recarga puede llegar hasta las 24 horas en un punto doméstico estándar.

La recarga se simplifica y puede programarse o diferirse a través de la pantalla táctil del habitáculo o mediante la aplicación My Citroën.

Sin duda, el ë-C4 es una de las mejores opciones del mercado de la movilidad eléctrica, gracias a un precio razonables, sin ayudas, de 32.000 euros, aunque sigue siendo elevado para una segunda opción de movilidad aún enfocada a la utilización urbana y periurbana.