80 años de Jeep: la marca que nació de la guerra

Este año se cumple la efemérides. Concretamente el 15 de julio de 1941, la antigua Willys-Overland Co. firmó un contrato con el Departamento de Guerra de los Estados Unidos para comenzar la producción del primer vehículo militar Jeep. Ochenta años después, la marca Jeep crece en todo el mundo con una gama de productos que son una referencia en el mundo de los todo terreno, incluso utilizando la tecnología de motores eléctricos.

Para celebrar su aniversario la marca Jeep ha anunciado la producción del nuevo Jeep Grand Cherokee, que se presentará en el próximo Salón Internacional del Automóvil de Nueva York. El Jeep Wrangler 4xe lidera actualmente la ofensiva electrificada de la marca. La capacidad 4x4 del Wrangler es posible gracias a un paquete de baterías sellado a prueba de agua y componentes electrónicos que pueden funcionar en las condiciones más exigentes. Impulsado por un motor turbo de inyección directa DOHC I4 de 2.0 litros, el 4xe cuenta con 380 caballos y un consumo aproximado de 3,5 litros a los 100 km en modo híbrido, más de 50 kilómetros de autonomía eléctrica con cero emisiones.

Pero la fama mundial de Jeep se debe a modelos que han sido leyendas desde hace muchos años y que, desde el siglo pasado, han hecho de esta marca un verdadero icono, como cuando el 7 de enero de 1992, en el Salón Internacional del Automóvil de Norteamérica en Detroit, el presidente de Chrysler, Bob Lutz, sacó el primer nuevo Jeep Grand Cherokee de la línea de producción de Jefferson, condujo por las calles de la ciudad y atravesó la puerta delantera de vidrio del Cobo Hall, representando así el avance de los SUV premium.

Unos años antes, en 1986, la llegada del Jeep Wrangler respondió al deseo del público de un SUV compacto con más comodidades. Tenía un centro de gravedad más bajo, una maniobrabilidad mejorada y un interior más confortable. Aunque compartía el perfil de carrocería abierta del CJ-7, contenía pocas piezas en común con su famoso predecesor. Mecánicamente, el Wrangler tenía más en común con el Cherokee. El 5 de agosto de 1987, poco más de un año después de la introducción del Wrangler, la American Motors Corporation fue vendida a Chrysler Corporation y la popular marca Jeep se convirtió en parte de la División Jeep/Eagle de Chrysler. Después pasó al grupo PSA que recientemente se integró en Stellantis.

Si retrocedemos un cuarto de siglo más, en 1963, el Jeep Wagoneer fue el original SUV premium que combinó la tracción a las cuatro ruedas con un cambio automático y cambió la idea de lo que la gente esperaba de un vehículo con tracción a las cuatro ruedas. Esto amplió el mercado y el atractivo de los vehículos 4x4 y sentó las bases del SUV moderno, que se anunciaba como «All-New, All-Jeep» (Todo nuevo, todo Jeep). Dos décadas más tarde, la marca Jeep lanzó el Grand Wagoneer, que elevó la experiencia premium 4x4 al siguiente nivel con características de serie como tapicería de piel, aire acondicionado, aislamiento acústico e inserciones de madera.

Pero fue en 1946, cuando se presentó el Willys-Overland, la primera camioneta con carrocería totalmente de acero de la industria, la Willys Wagon. Pero lo verdaderamente novedoso fue la incorporación en 1949 de la tracción a las cuatro ruedas para crear el primer SUV. Capaz de llevar a siete pasajeros con comodidad, transportar cargas y abordar incluso los senderos más difíciles, la Willys Wagon cambió las reglas del juego. El Wagon diseñado por Brooks Stevens se mantuvo en producción durante casi 20 años, más que cualquier otro automóvil estadounidense contemporáneo de su época.

Recién terminada la segunda guerra mundial, en 1945 Jeep se creó el primer vehículo ligero con tracción a las cuatro ruedas disponible en grandes cantidades para todo el público. Si bien el CJ-2A compartía la arquitectura básica del MB, hubo varias mejoras notables, como un portón trasero abatible, la rueda de repuesto lateral, faros más grandes y una toma de corriente.

Por último, hay que recordar como un hito importante en esta historia que en 1941, el gobierno de los Estados Unidos le otorgó a Willys-Overland el contrato para ser el proveedor principal del nuevo vehículo militar de un cuarto de tonelada. Se produjeron más de 350.000 de estos Jeep MB 1945 y sentaron las bases del Jeep CJ civil que comenzaría su producción incluso antes de que terminara la guerra.