Movilidad

La fabricación en serie de combustibles sintéticos es ya una realidad

Porsche inaugura en el sur de Chile su primera planta que producirá anualmente más de 550 millones de litros de combustible limpio

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Porsche y los socios internacionales que trabajan en colaboración con la empresa chilena Highly Innovative Fuels (HIF) han comenzado en la planta piloto Haru Oni, en Punta Arenas, la producción industrial de combustibles sintéticos o e-fuels. En la ceremonia de inauguración los directivos de la empresa repostaron un Porsche 911 con los primeros litros de combustible sintético producidos en las instalaciones.

Los e-fuels, fabricados a partir de agua y dióxido de carbono con la ayuda de energía eólica, permiten el funcionamiento prácticamente neutro en emisiones de CO2 de los motores de gasolina. La apuesta de Porsche por la energía alternativa es doble: movilidad eléctrica complementada con combustibles sintéticos que reducen las emisiones de dióxido de carbono al mínimo. Teniendo en cuenta el volumen del parque automovilístico mundial, la producción industrial de combustibles sintéticos debe seguir impulsándose en todo el planeta y con la planta piloto chilena de e-fuels, Porsche desempeña un papel de liderazgo en este desarrollo.

En opinión de los directivos de la marca de Stuttgart, el potencial de los combustibles sintéticos es enorme. Actualmente hay más de 1.300 millones de vehículos con motores de combustión en todo el mundo. Muchos de ellos seguirán circulando durante décadas, y los e-fuels ofrecen a los propietarios de esos automóviles una alternativa casi neutra en carbono. Al ser un fabricante de motores eficientes de alto rendimiento, Porsche dispone de amplios conocimientos en el campo de los combustibles.

En la fase piloto está prevista la producción de unos 130.000 litros de e-fuels anuales. Inicialmente, el combustible será utilizado en proyectos de pequeña escala, entre ellos las carreras de la Porsche Supercup. Tras la fase piloto, la primera ampliación en Chile, prevista para mediados de esta década, incrementará la producción hasta los 55 millones de litros anuales. Unos dos años más tarde, se espera que la capacidad sea de 550 millones de litros.

El sur de Chile ofrece condiciones ideales para la producción de combustibles sintéticos, ya que el viento sopla unos 270 días al año, lo que permite que las turbinas eólicas funcionen a pleno rendimiento. Además, Punta Arenas está situada cerca del Estrecho de Magallanes y, desde el puerto de Cabo Negro, los e-fuels pueden ser transportados de la misma manera que los combustibles tradicionales y pueden ser distribuidos utilizando la infraestructura existente.

Los combustibles sintéticos complementan la electromovilidad y forman parte de la estrategia de energía sostenible del fabricante de vehículos deportivos. que ya ha invertido más de 100 millones de dólares en el desarrollo y la producción de e-fuels. Están además previstas otras plantas de e-fuels en Estados Unidos y Australia.