Citroën C5 Aircross y la hibridación asequible

Si lo que busca y necesita el comprador es obtener con su nuevo automóvil una etiqueta ECO para transitar por los cada vez más restrictivos espacios urbanos no hay que complicarse la vida con sofisticados sistemas híbridos, a la postre caros de adquirir y mantener, y sí optar por sistemas racionales que cumplan satisfactoriamente con la adquisición de la codiciada etiqueta y, de paso, la conducción eficiente donde importa, en ciudad.

Ese sistema racional es sin duda el incorporado al remozado Citroën C5 Aircross, un SUV de éxito para la marca, que acaba de incorporar la hibridación ligera de 48V, que con una batería pequeña y un motor eléctrico suficiente ayuda en esas aceleraciones y recuperaciones que son el peor enemigo del consumo de carburante, especialmente en la ciudad.

Faltaba en la gama del C5 Aircross esta hibridación ligera, conocida como MHEV (Mild Hybrid Electrical Vehicle), pero también como la de 48 Voltios, porque esta es su tensión de trabajo, frente a la alta tensión del resto de los sistemas de hibridación, como el enchufable o PHEV ya existente en la gama C5 Aircross y que ha estado siendo la de mayor éxito de este modelo, con nada menos que el 30% de las ventas.

Con la llegada de este 48 V, el C5 Aircross gana muchos enteros y a un precio mucho más asequible que el que es necesario desembolsar para llegar al enchufable, que, cierto, ofrece la etiqueta ‘O’ emisiones, pero que puede convertirse en el uso diario en un quebradero de cabeza y de bolsillo si no se hace un uso correcto de esta hibridación, que penaliza los viajes por carretera.

El nuevo C5 Aicross Hybrid aporta algunas novedades, como la de una actualización del motor de gasolina utilizado en el resto de la gama, el tricilíndrico de 1.2 litros, con un 40% de piezas nuevas y un incremento de la potencia en 6 caballos para llegar a los 136 y una entrega de par de 230 Nm. Al motor de gasolina se le suma un pequeño motor eléctrico de 21 kW (28 CV) y par de 55 Nm, alimentado por una batería de 0,85 kWh de 48 V, construida a base de iones de litio y de refrigeración por agua. El sistema funciona bajo el gobierno de la transmisión de doble embrague ë-DC6.

Esta combinación permite, por debajo de 30 km/h circular en modo totalmente eléctrico durante un kilómetro, al margen de que su función es la de asistir al motor principal en las aceleraciones, que son las fases de mayor consumo, con el resultado de un ahorro en torno al 15%, que puede llegar a un 30% si los trayectos son urbanos, lo que le sitúa como la opción rentable frente al diésel, aunque esta es una aseveración de marca discutible, porque esta hibridación es frugal siempre y cuando no haya abuso de acelerador, haya preponderancia de recorridos urbanos y en carretera haya suavidad con el acelerador.

La gestión del sistema híbrido es enteramente automática, sin que el conductor intervenga, salvo el uso inteligente del acelerador, que requiere de un tiempo de adaptación para obtener los mejores resultados de un sistema cuya batería se recarga en frenadas y deceleraciones.

Si la conducción del C5 Aircross es de antemano y con toda probabilidad la de mayor confort, gracias a su patentado sistema de suspensión, además de una notable insonorización de la cabina, en este caso es aún más placentera, consecuencia directa de las mejoras introducidas en el motor térmico y de la eficiencia con la que, trabajado el sistema, con transiciones que pasan completamente desapercibidas.

El confort de la suspensión, que transmite suavidad de reacciones y, sin embargo, no compromete las reacciones de este SUV en curva, necesita de un periodo de adaptación porque hay que acostumbrase a unas reacciones atípicas, que están en consonancia con las que aquellas suspensiones neumáticas de los modelos históricos de Citroën, cuyas sensaciones trata de recuperar la marca con este suspensión única, la Advanced Confort, a la que, por otra parte, hay que sumarle un diseño de asientos muy confortables, lejos ya de aquellos hundidos de los primeros C4.

La nueva versión híbrida de este C5 Aircross se inserta en una gama formada por dos motores térmicos, gasolina y diésel, ambos de 130 caballos, y dos híbridos enchufables, uno de 180 CV y el de 225 CV que fuera el primero en formar parte de la oferta.

Interesante también de esta hibridación ligera son sus precios, ya que, dependiendo de los acabados, se sitúa entre 30.000 y 37.000 euros, una vez aplicados los descuentos programados por la marca.