La DGT avisa: todos los vehículos deberán incorporar este nuevo dispositivo desde julio

La Comisión Europea, en su Reglamento de Ejecución 2019/621, introdujo por vez primera los Sistemas Avanzados de Asistencia al Conductor (ADAS, por sus siglas en inglés) dentro de la legislación de los estados miembros. Esta incorporación progresiva de los ADAS en los vehículos de nueva fabricación se ha ido materializando siguiendo las directrices establecidas por dicho reglamento.

Este periodo de adaptación culminará en el próximo mes de julio, marcando exactamente dos años desde la aprobación de la norma. A partir de ese hito, todos los vehículos comercializados en el espacio Schengen tendrán que incorporar obligatoriamente estos sistemas de asistencia al conductor, y se prohibirá cualquier nueva homologación para vehículos que no estén debidamente equipados con estos sistemas.

¿Qué son los sistemas ADAS?

Los sistemas ADAS han sido diseñados con el objetivo de combatir las principales causas de los accidentes de tráfico: los fallos humanos. Esto implica evitar situaciones de riesgo como las distracciones al volante, el cansancio, la velocidad excesiva, la conducción bajo la influencia del alcohol, entre otros.

Así, los ocho sistemas ADAS que se harán obligatorios son: Alcoholímetros antiarranque, Asistente de Velocidad Inteligente (ISA), Detector de fatiga y somnolencia, Alerta de cambio involuntario de carril (LDW), Sistema de Frenada de Emergencia BAS y EBA, Cámaras traseras con detección de tráfico cruzado, Caja negra (EDR) y Alerta de cinturón en las plazas traseras.

Un sistema que ha generado un especial interés es el Registrador de Datos de Eventos (EDR, por sus siglas en inglés), un dispositivo que recuerda a la caja negra de los aviones… pero aplicada al campo automovilístico.

¿Qué es el sistema EDR?

El sistema Event Data Recorder o Registrador de Datos de Eventos tiene como objetivo registrar y almacenar datos cruciales del funcionamiento del vehículo en momentos previos y posteriores a un accidente. De esta manera, estas cajas negras automovilísticas se convertirán en herramientas esenciales para determinar las causas exactas de los incidentes, aportando información valiosa para la investigación y prevención de futuros accidentes.

Los EDR tendrán un papel fundamental en la recopilación de información relacionada con el rendimiento y funcionamiento del vehículo. Estos dispositivos tienen la capacidad de registrar datos vitales, tales como el número de revoluciones que realiza el motor, la velocidad a la que se desplaza el vehículo, la trayectoria seguida y la intensidad de la fuerza de frenado aplicada.

Los sistemas EDR también tienen la capacidad de grabar de manera cíclica cada 30 segundos. Esta función permite la recogida de datos en intervalos regulares, lo que resulta invaluable en caso de accidente. Gracias a esta característica, será posible conocer todo lo que sucedió y con todo lujo de detalles hasta medio minuto antes del impacto. Además de capturar datos previos al incidente, estos dispositivos también registran lo que ocurre inmediatamente después del mismo. Específicamente, los EDR pueden proporcionar información sobre los primeros cinco segundos tras el impacto. Esta clase de datos puede ser crucial para entender las circunstancias que rodean un accidente y contribuir de manera significativa a su investigación.