Prueba
EX30: la esencia de Volvo con todos sus atributos
Este modelo cien por cien eléctrico ya está a la venta en España con un precio que arranca en 37.500 euros
El tamaño no importa a la hora de crear un coche que mantenga todas las virtudes de la marca que lo fabrica. Es algo que podemos comprobar en el último modelo de Volvo, el EX30 que, en un tamaño más reducido que sus hermanos de gama, mantiene todas las virtudes que siempre han caracterizado a los modelos de la casa de Gotemburgo. Presentado durante el verano pasado, las primeras unidades ya están llegando a los concesionarios.
El EX30 fue un éxito desde el momento de su lanzamiento ya que, en los primeros meses, sin haber visto físicamente el automóvil, ya se registraron en España unos 2.000 pedidos. Ahora se están realizando las primeras entregas a los más adelantados y ya se puede admirar en los concesionarios de la marca. Esta buena aceptación en Europa ha provocado que en breve plazo se amplíe la producción a la factoría de Gante, complementando así la actual fabricación en China.
Porque este EX30, a pesar de ser un poco más pequeño que el resto de los modelos de la marca, ya que mide 4,23 metros de largo y 1,86 de ancho, mantiene todas las características de excelencia que han caracterizado a Volvo durante su existencia. Tanto en los aspectos de seguridad activa y pasiva como en los de sostenibilidad y electrificación. Para su construcción se emplean una gran cantidad de productos reciclados, con el 25% del aluminio, o el 17% del acero o los plásticos. Y al final de su vida, el 95% de sus materiales podrán ser reutilizados.
Frontal cerrado
En su estética estamos asimismo ante un auténtico Volvo por su líneas puras, rectas y elegantes. Destaca el frontal cerrado, al no necesitar sus motores eléctricos radiadores y sus grandes entradas de aire. Algunos detalles acrecientan su personalidad, como los dos nervios del capó delantero, los ensanchados pasos de rueda, sus llantas de cinco brazos de hasta 20 pulgadas, el spoliler trasero o el tono negro del techo que se mantiene en todas las opciones de colores, que son cinco: amarillo, azul, blanco, gris y negro. La parte posterior es muy atractiva, con un diseño original de luces que recuerda a las de los Polestar (pertenecen al mismo grupo) y un portón que da acceso al maletero que tiene una capacidad de 318 litros, que pueden hasta triplicarse cuando abatimos los respaldos de los asientos traseros.
El interior guarda asimismo una identidad de marca con un diseño minimalista y utilización completa de materiales reciclados. El sonido es especialmente brillante a través de una barra de altavoces que va de un lado a otro en la parte superior del salpicadero. Tras el volante multifunción ligeramente achatado para su mejor manejo, el conductor tiene algunos controles en un panel frente a sus ojos pero la mayoría de los datos de interés aparecen en la gran pantalla central de 12 pulgadas con todos los servicios habituales, pero que nos indica además otros datos de interés en la circulación, como la velocidad a la que vamos, el consumo instantáneo, la carga de batería que nos queda, los mapas de nuestro desplazamiento…También podremos estar conectados para saber los puntos de recarga que necesitemos o con los concesionarios de la marca si tenemos algún problema mecánico que haya que resolver. Como es de esperar en un Volvo, el EX30 viene equipado con todos los sistemas de seguridad activa y pasiva. Un capítulo en el que siempre ha brillado la casa sueca. El coche está rodeado de cámaras y sensores que nos previenen de todo lo que tengamos cerca, como ángulo muerto, especialmente para los ciclistas que a veces no vemos y abrimos la puerta sin querer, ayuda en adelantamientos para mantener la distancia de seguridad, incluso a los ciclistas, alerta de distracción o sueño del conductor… y el muy útil sistema de aparcamiento que introduce el coche en el hueco sin intervención del conductor.
En lo relativo a la motorización, el EX30 se ofrece con tres alternativas siempre totalmente eléctricas: Single Motor, Single Motor Extended y Twin Motors. Las dos primeras de tracción trasera y la última con cuatro ruedas motrices. Las potencias declaradas son de 272 caballos para las Single y de 428 caballos en el caso del Twin. La diferencia entre las dos primera radica en la batería, ya que la Single Extended monta una batería de 69kw/h similar a la Twin, frente a los solo 51kw/h de la Single. Ello se traduce en una mayor autonomía, que en el caso de la batería pequeña es de 344 kilómetros y con la batería mayor llega hasta los 476 kilómetros, según las cifras del fabricante. En el Twin, la autonomía es de 450km y las prestaciones son importantes, con una aceleración de cero a cien en solo 3,6 segundos. En todos los casos son baterías de recarga rápida, ya que en un cargador profesional recuperan del 10 al 80% de su capacidad en solo 25 minutos. En cuanto a los precios, la opción más barata, es decir, el Single, cuesta 37.500 euros y la Twin llega a los 48.995 euros. La de autonomía extendida tiene fijada su factura en 42.763, pero la marca ha realizado una promoción de lanzamiento de cinco mil euros, con lo cual se quedaría al mismo precio que la opción más básica.
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