Suzuki afina estilo y emisiones en el Swift de cuarta generación

Esta próxima primavera será el momento para la nueva y cuarta generación del exitoso Swift, en el que Suzuki ha puesto especial énfasis en mejorar sus cualidades afinando el estilo y mejorando las emisiones, capítulo que trae de cabeza a todos los fabricantes ante el constante endurecimiento de las normas. La cuarta generación del Swift, así considerada porque es la cuarta global del modelo, llegará a los mercados con la marca de más de nueve millones de unidades vendidas desde que en 2004 naciera la primera generación global del modelo, hasta convertirse hoy en un modelo icónico de la marca japonesa, especializada en el diseño y construcción de vehículos de pequeño y mediano tamaño.

Veinte años después de la entrada en el mercado de la primera generación, el nuevo Swift llega con las mismas medidas: 3.860 mm de longitud, 2.450 mm de distancia entre ejes y 263 litros de maletero. La cuarta generación del Swift estrena un motor de gasolina de tres cilindros y 1.2 litros, que entrega ofrece una potencia de 83 caballos, que lleva asociado un sistema de hibridación ligera de 12 voltios SHVS de hibridación ligera de 12 V con el que dispone de la etiqueta ECO de la DGT. Los consumos, aún por certificar en Europa, están entre 4,4 y 4,7 litros cada 100 kilómetros.

La mecánica puede estar gobernada por una caja de cambios manual o automática, además de poder acceder a la única tracción 4x4 de su segmento de mercado, que tiene notable éxito en las zonas de montaña de toda Europa.

En cuanto al diseño, esta nueva generación mantiene los rasgos de identificación del modelo, a los que se les ha dado cambios que mejoran la estética, como es el caso de la línea de carácter, ausente en las anteriores generaciones. La línea de cintura está muy marcada y conecta con el capó delantero, en tanto el pilar trasero conecta con el techo para acentuar el contraste cromático en las versiones bitono. Las cerraduras en la parte trasera son ahora convencionales, en lugar de las escamoteadas anteriores.

Los grupos ópticos también han sido modificados, así como la calandra delantera. La zaga está caracterizada por formas trapezoidales. Para el Suzuki Swift ha sido dispuesta una paleta de colores de 9 tonalidades monocolor y 4 bitono, con dos nuevas incorporaciones tonales, las denominadas ‘Azul frontier’ y ‘Cool Yellow ‘.

El interior presenta modificaciones que mejoran el ya cualitativo acabado de las generaciones anteriores. Domina el salpicadero la nueva pantalla de 9 pulgadas en la que se presentan, por ejemplo, los grafismos de Android Auto o del sistema Apple CarPlay. El nuevo Suzuki incorpora la aplicación Suzuki Connecta ya estrenada en el nuevo S-Cross. La cuarta generación Swift, de la que aún no se disponen precios, aunque la marca baraja entre 18.500 y 23.000 euros, se ofrece con un amplio equipamiento de seguridad y de asistencia a la conducción.