Videos

La Audiencia cierra la investigación contra Trapero y le acerca al banquillo por sedición

El ex mayor de los Mossos está procesado por pertenencia a organización criminal y dos delitos de sedición

Josep Lluís Trapero, en la Audiencia Nacional /Foto: Jesús G. Feria
Josep Lluís Trapero, en la Audiencia Nacional /Foto: Jesús G. Ferialarazon

El ex mayor de los Mossos está procesado por pertenencia a organización criminal y dos delitos de sedición.

La juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela ha concluido la investigación por sedición y pertenencia a organización criminal contra el ex mayor de los Mossos d´Esquadra Josep Lluis Trapero, según han confirmado fuentes jurídicas. Tras el cierre del sumario, será ahora la sección primera de la Sala de lo Penal de este tribunal quien acuerde la apertura de juicio oral. En su resolución, Lamela constata que ya se han practicado "cuantas diligencias se han estimado necesarias para la comprobación del delito"y la participación de cada uno de los investigados, por lo que procede cerrar el sumario y remitirlo a la Sala para su enjuiciamiento. No obstante, los magistrados de la sección primera deberán resolver antes los recursos de apelación interpuestos por los imputados contra el auto en el que la instructora confirmó su decisión del pasado 4 de abril de procesar a Trapero, al ex director de los Mossos Pere Soler, al que fuera número dos de la Conselleria de Interior César Puig y a la ex intendente de la Policía autonómica Teresa Laplana por el asedio a la sede de Economía el 20 y 21 de septiembre del pasado año y por la jornada del referéndum ilegal del 1-O. En el caso de Trapero, Lamela le imputa dos delitos de sedición y uno de pertenencia a organización criminal.

En esa resolución, Lamela apunta a la existencia de una «compleja y heterogénea organización» cuyo objetivo era lograr la secesión de Cataluña, para lo que pusieron en marcha «una premeditada estrategia perfectamente coordinada, con arreglo a un plan común y con reparto de papeles y responsabilidades entre autoridades gubernamentales, parlamentarias y civiles, principalmente a través de asociaciones independentistas, como ANC (Asamblea Nacional Catalana) y Òmnium Cultural».

Tanto Trapero como Soler y Puig integraban, según la magistrada, una organización jerarquizada «bajo una dirección común en cuya cúspide se encontraba el president de la Generalitat de Cataluña», entonces Carles Puigdemont. Una organización "con carácter estable"desde hace ya más de dos años, con asignación de tareas y con una "confluencia estratégica perfectamente sincronizada"que fue lo que «en suma permitió la celebración del referéndum ilegal el día 1 de octubre y la ulterior declaración de independencia aprobada por el Parlament de Cataluña el pasado 27 de octubre».

A Trapero, además, le reprocha que actuara de forma "enmascarada"el 1-O para que los Mossos no ejecutaran el mandato judicial de impedir la celebración del referéndum ilegal.