La Región de Murcia, segunda con mayor subida de paro con más de 2.100 desempleados más en agosto

El número de desempleados registrados en las oficinas de los servicios públicos de empleo (antiguo Inem) en la Región de Murcia al término del mes de agosto se situó en 92.044, lo que supone un aumento de 2.153 personas respecto a julio, según datos difundidos este viernes por el Ministerio de Trabajo.

En términos relativos, el incremento del paro en agosto en la Región fue del 2,4% respecto al mes anterior, por encima de la media nacional, donde subió un 1,40%.

En términos interanuales, el desempleo descendió en los últimos doce meses en Murcia en 8.818 personas (-8,74%), frente a la disminución del 12,29% nacional.

La consejera de Empresa, Empleo, Universidades y Portavocía, Valle Miguélez, ha destacado que, “aunque no podemos hablar de datos positivos, estas cifras son las esperadas para un mes de agosto, en el que tradicionalmente sube el paro por el final de la campaña estival, si bien este año lo hace en menor medida que en años recientes”.

A juicio de la consejera, “esta tendencia nacional pone de manifiesto que la reforma laboral del Gobierno de Pedro Sánchez, que pretendía reducir el empleo temporal, ha sido un fracaso absoluto, como todas las políticas relacionadas con el empleo que ponen en marcha”.

Los datos de afiliación media a la Seguridad Social conocidos este viernes, al igual que en el resto del país, muestran un descenso de un 1,74 por ciento de afiliados respecto al mes anterior. Pese a ello, en la Región se registran 15.208 trabajadores afiliados más que el año pasado, hasta llegar a un total de 625.950.

El aumento del paro se dio en su mayor parte en el sector servicios, donde se contabilizaron 1.571 desempleados más. El paro subió también en industria, con 295 personas paradas más, en agricultura (281) y en construcción (227).

Aunque este aumento del paro es “algo normal para un mes de agosto, en esta ocasión ha sido menor a la media de los años más recientes, a excepción de 2020 y 2021, directamente afectados por la Covid-19 y que rompieron la tendencia habitual”, han indicado fuentes de la consejería.

Miguélez ha indicado que “desde el Gobierno regional continuamos poniendo en marcha medidas que ayuden a impulsar el mercado laboral, sobre todo, de cara a los próximos meses en los que se esperan más dificultades, que se incrementan con las medidas puestas en marcha por el Gobierno de la Nación en el Decreto de medidas de ahorro energético, que no hacen más que asfixiar a los pequeños comerciantes y a los hosteleros, con la obligatoriedad de instalar puertas y la regulación de la temperatura de los locales, sin tener en cuenta las peculiaridades climáticas de cada zona y sin haber realizado informes técnicos sobre el coste de estas medidas”.

“Otoño desesperanzador”

Por su parte, la Unión General de Trabajadores (UGT) de la Región de Murcia ha advertido que los datos de agosto del número de parados reflejan “una tendencia de desaceleración de la economía, de la que los agentes económicos y sociales ya llevamos meses avisando”, a lo que han añadido que la Región de Murcia “se sitúa como la segunda comunidad donde más ha subido el paro en agosto, sólo superados por Cataluña”.

En nota de prensa achacan esta situación a la “enquistada situación de la negociación colectiva, con una patronal que se niega a sentarse a negociar en sectores y empresas muy importantes”.

“A día de hoy, la subida salarial media está en torno al 2,6 por ciento, frente a una inflación que ronda el 9 por ciento anual, lo que ya está dejando atrás a muchísimos trabajadores, que día tras día van perdiendo poder adquisitivo, frente a unas subidas de precios con componentes claramente especuladores y de recogida de beneficios”.

Por otro lado, han reconocido, “la crisis internacional, que ha provocado subidas desorbitadas de la electricidad y los carburantes, y un aumento de los intereses bancarios está agudizando las subidas en las hipotecas de millones de españoles”.

Todo esto, “nos sitúa ante un desesperanzador otoño, que se debe abordar con subidas salariales acordes con la inflación, el control de precios de la electricidad y mantener las ayudas a la compra de carburantes, y por supuesto, con una exigencia a la patronal que se siente a negociar, y que no vuelva a aprovecharse de la situación para empobrecer aún más a la clase trabajadora”, han defendido desde el sindicato.

En este sentido, han concluido que “las expectativas no son muy positivas para los próximos meses, y por ello si no se corrige la postura de la patronal, llevaremos a cabo movilizaciones y huelgas para exigir el reparto justo de la riqueza y que se corrija la actitud de la patronal española, sin escrúpulos a la hora de aumentar sus beneficios a costa de sus propios trabajadores”.