Medio ambiente

Las naves que guardarán la biodiversidad de las salinas y arenales del Mar Menor

ANSE obtiene la licencia para iniciar el proyecto de regeneración que prevé la recuperación de ocho hectáreas para la recuperación tradicional de sal

Fangos en el Mar Menor
Fangos en el Mar MenorAYUNTAMIENTO DE CARTAGENAAYUNTAMIENTO DE CARTAGENA

La Concejalía de Urbanismo del Ayuntamiento de Cartagena, que dirige la vicealcaldesa Ana Belén Castejón, ha concedido una licencia a la Fundación ANSE que les permitirá adaptar dos naves, situadas en el entorno de las Salinas de Marchamalo, y que destinarán a la conservación y recuperación de la vegetación natural y la biodiversidad en el Monte Blanco y en la Caleta del Estacio del Mar Menor.

“Esta actuación, que cuenta con un presupuesto de ejecución material de más de 100.000 euros, está enmarcada en el proyecto de la Fundación ANSE de Regeneración de salinas y arenales en el Mar Menor (Resalar), que servirá para la promoción de la bioeconomía y contribuirá a la transición ecológica”, ha indicado la vicealcaldesa.

En concreto, con este proyecto, “ANSE promueve la recuperación de 8 hectáreas de las salinas para la producción artesanal de sal, manteniendo y aumentando la biodiversidad, la restauración de las naves adquiridas y la demolición de otras construcciones en ruinas”, ha afirmado Castejón.

Cabe recordar que, en agosto del pasado año, ANSE adquirió un terreno de casi 4.000 metros cuadrados y estas dos antiguas naves industriales de las Salinas de Marchamalo para recuperar la actividad salinera en la zona oriental de este enclave situado al inicio de La Manga del Mar Menor, además de potenciar su biodiversidad. Las naves industriales adquiridas son las únicas de todas las instalaciones de las antiguas salinas que no se encuentran en ruinas, y conservan las cubiertas originales de teja.

La intervención que se va a llevar a cabo consiste en la mejora de las condiciones climáticas del interior, a través de la instalación de aislamiento y el proyecto está vinculado la recuperación de las balsas de las salinas colindantes, permitiendo así almacenar el material necesario para la puesta en marcha de la actividad salinera, así como la investigación y la divulgación de proyectos ambientales.