Agricultura

El Gobierno murciano y los regantes, de la mano para defender el Tajo-Segura

La consejera Sara Rubira inicia su etapa al frente de la Consejería reiterando “el compromiso del Gobierno de López Miras” con el sector agrario y exigiendo “un Pacto Nacional del Agua”

La consejera de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Sara Rubira, junto al presidente de Scrats, Lucas Jiménez
La consejera de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Sara Rubira, junto al presidente de Scrats, Lucas JiménezScrats

La primera reunión de la consejera de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Sara Rubira, ha sido con el sindicato de regantes del Tajo-Segura. Un encuentro con el que se estrena la nueva titular de la cartera con la que ha querido marcar el camino sobre cuál será su reivindicación al frente del Departamento. "Siempre nos enfrentaremos a cualquier recorte al Tajo-Segura, cuyos efectos se están notando en el campo con consecuencias muy graves".

Así lo ha puesto de manifiesto tras el encuentro con el presidente del Sindicato Central de Regantes (Scrats), donde ha insistido en la apuesta del Gobierno autonómico por "una España que no esté rota por el agua, sino unida a través de ella".

La consejera, además, ha destacado que el Gobierno autonómico "siempre ha defendido" la infraestructura hídrica, al tiempo que ha insistido en que "no se tiene que romper España por el agua", sino que este recurso "tiene que unir" al país.

Rubira ha asegurado que la situación actual "es bastante complicada" porque a "los agricultores no se les está apoyando con esos recortes que se está haciendo al trasvase", un hecho que ha contrapuesto con el "compromiso firme" de López Miras "con los agricultores y con los regantes".

Una línea de defensa que "vamos a seguir" allá "donde haga falta" y que está basada en "el principio de solidaridad, que es el que se tiene que tener entre los territorios", porque "no tiene que haber guerras".

Para la consejera, es fundamental la puesta en marcha de un Pacto Nacional del Agua "que acabe con las deficiencias entre los territorios y sea solidario", y que "nos unamos todos para que esta situación que estamos viviendo no continúe porque, al final, el que lo pasa mal es el campo, las familias que viven del campo".

"Al presidente del sindicato ya le he mostrado que quiero trabajar con él de la mano, con este sindicato", para "trabajar una planificación hidrológica que mantenga las cuencas de manera equitativa manteniendo los mismos criterios", ha comentado.

Por su parte, el presidente de Scrats, Lucas Jiménez, ha expresado su "enhorabuena" a la consejera, a la que no ha tenido que explicar "gran cosa en relación a la problemática del trasvase" porque "viene del campo" y "se ha dedicado profesionalmente en los últimos años a defender una comunidad de regantes", la de El Porvenir de Abanilla.

El presidente de SCRATS ha indicado que los problemas que asisten al regadío del Levante son "básicamente" dos, "la escasez de recursos y recursos excesivamente caros".

Con todo, ha dicho Jiménez, "nos ponemos a trabajar ya" porque la consejera "sabe perfectamente que no hay 100 días de cortesía, tenemos muchos frentes abiertos, la misma voluntad que había sigue habiendo por parte de la nueva consejera de trabajar en común, ya también se están entrelazando reuniones inminentes con la Comunidad Valenciana porque son muchos frentes, los jurídicos y de otra índole que tenemos por delante.

"Yo creo que lo importante era que nos viéramos y que sentáramos las bases para empezar a funcionar porque son muchos los retos que afectan a esta cuenca y a esta región en materia de agua", ha manifestado.

Año hidrológico "complicado"

Jiménez ha reconocido que el año hidrológico que arranca el próximo 1 de octubre será "complicado" para los regantes del Levante. Así, ha señalado que las últimas lluvias "han ralentizado el riego y puede sobrar algún hectómetro", pero al tiempo ha advertido de que "la bolsa que veníamos arrastrando desde tiempos de la DANA", y que "nos permitía arrancar el año con cierta confianza", ha "desaparecido".

"Por lo tanto, arranca un año complicado", ha dicho el representante de Scrats, que ha recordado que la cuenca se encuentra "en nivel de alerta" y desconoce "el margen de maniobra" que ofrecerá la desalación, en tanto que ésta "va íntimamente ligada a la existencia de agua en cabecera proveniente del trasvase".

"El agua desalada se deposita en La Pedrera, que es un embalse fin del trasvase, no va hacia arriba el agua. Para que la inmensa mayoría de las comunidades de regantes dependientes del trasvase en las tres provincias puedan recibir agua de la desaladora de Torrevieja es fundamental que baje agua del trasvase hasta que no esté hecha la famosa tubería de conexión con Ojós", ha añadido.

En este contexto, desde Scrats "estamos expectantes", especialmente ante los meses próximos, que son los que "suelen traernos la deseada agua en forma de lluvia y nieve". Esto, ha dicho, hace que los regantes se conminen "a la esperanza" de que llueva, "porque si no la situación será muy complicada" por varias razones.

Las dos primeras, según ha detallado Jiménez, están relacionadas con el hecho de que "el agua tradicional, la del trasvase y la de la cuenca del Segura, empiezan a escasear" y "porque esa escasez va a provocar que no podamos permutar agua desalada". "Y tercero, porque cada vez que hay nivel 3 hay una ministra que recorta", ha precisado.

Todo esto, ha aseverado, hace que "el futuro se nos presente un poco complicado" a los regantes, ha concluido Lucas.