
Temporal
Un nuevo temporal en Águilas deja lluvias torrenciales de 70 litros en una hora
El municipio costero registra 71 incidencias, las más graves, el rescate de nueve personas de sus vehículos
Llueve sobre mojado en Águilas. Una fuerte tormenta hizo acto de presencia en torno a las 10 de la mañana de este martes en el municipio costero, cuyas calles se vieron anegadas por el agua en cuestión de minutos. De hecho, la Agencia Estatal de Meteorología en la Región preveía lluvias moderadas de unos 30 litros por metro cuadrado en el intervalo de una hora; una previsión que se vio rápidamente superada, ya que los pluviómetros llegaron a recoger más del doble: unos 70 litros por metro cuadrado en menos de 60 minutos. Es más, la Aemet cambiaba el aviso amarillo que estaba activo, a nivel naranja, debido la intensidad de unas precipitaciones que han generado 71 incidencias, según informaba el Centro de Coordinación de Emergencias de la Región-112. Otras tres se producían en el también municipio de costero de Mazarrón.
La fuerza del agua ha hecho que los cuerpos de Emergencias (Bomberos del CEIS y Policía Local de Águilas) tuvieran que efectuar hasta 6 rescates. El más destacado fue el de 9 personas que viajaban en un vehículo y un camión por la carretera RM-D18, a la altura de Calarreona, en este municipio costero. Afortunadamente, ninguna de ellas resultaba herida.
Otra de las incidencias reseñables se producía en el colegio San Juan de las Águilas, donde el patio quedaba completamente inundado en cuestión de minutos por el diluvio. El director de este centro educativo, Ramón Soto, aseguraba en declaraciones a LA RAZÓN, que habían activado un protocolo, consistente en trasladar a los alumnos a la segunda planta del edificio, que estaban cursando clase en ese momento en la tercera planta, con el objeto de «evitar goteras y desprendimientos». En este sentido, hacía «un llamamiento a la tranquilidad de los padres» (que habían sido informados previamente en un comunicado) y les pedía que «no acudieran en masa» a recoger a sus hijos, para no poner en riesgo su seguridad al volante de sus coches. «Los alumnos están bien, entretenidos haciendo actividades, para ellos es como un día libre», decía Soto.
En la misma línea se expresaba la alcaldesa de Águilas, María del Carmen Moreno, quien afirmaba contundente: «no es el momento de recoger a los niños, pedimos precaución y que se movilicen los vehículos lo mínimo posible». Moreno también hacía un llamamiento a la calma y aseguraba, «no importa perder un coche, lo que sí importa es perder un vida humana». Y es que el recuerdo de José Hernández, el vecino de 50 años de la pedanía lorquina de Ramonete, que pereció arrastrado por un torrente de agua el pasado episodio de lluvias, está todavía muy presente.
Unas lluvias torrenciales que han provocado que efectivos de bomberos y también vecinos se empleen a fondo para achicar agua de sus casas en bajos y de sus garajes. Juan, un vecino aguileño, contaba en declaraciones a este periódico, que había tenido que sacar dos dedos de agua del interior de su vivienda. «Hemos abierto las alcantarillas para que drenase el agua y no sabes la barbaridad de toallitas y de porquería que ha salido de ahí», se lamentaba.
Unas precipitaciones muy copiosas en un corto espacio de tiempo, que provocaron la crecida de las ramblas de este municipio. Es el caso de la de Matalentisco y la rambla de La Culebra, que discurre y desemboca en la playa, a escasos metros del auditorio Infanta Elena. En los bajos de este edificio se encuentra el restaurante Casa Bartolo. Alberto, uno de sus trabajadores, decía que habían tenido que ‘desaguar’, porque el torrente también se había colado en sus instalaciones. «Lo importante es que ya lo tenemos todo limpio para poder dar servicios», aseguraba optimista este joven.
Unas lluvias que se extendían a lo largo de toda la jornada a otros puntos de la Región de Murcia, en aviso amarillo por estos fenómenos meteorológicos adversos. De hecho, la dirección general de Ciudadana y Emergencias decretaba el cierre de 15 centros educativos en la tarde de ayer para prevenir posibles víctimas en este nuevo episodio de mal tiempo, que azota nuevamente a la Región.
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