Opinión

Cosas de Trump y de...

Sánchez. Parece como si esta vez el presidente de Estados Unidos hubiese estado moderado en la reciente Cumbre del G7 celebrada en Biarritz. Parece que ha dado su brazo a torcer, un poco solo, en la guerra comercial que mantiene su país con China. Parece también que, de momento, ha suavizado su posición hacia aquellos países, como Francia, que mantienen su apoyo a la tasa Google, que afectará a las tecnológicas norteamericanas. Parece que hay otro ambiente en las relaciones con Irán. Insisto siempre en lo de parece porque con Trump nunca se sabe. Todavía recuerdo que el año pasado, dentro de la reunión de este tipo que se celebró en Canadá, dijo una cosa, pero en cuanto se subió al avión presidencial cambió de opinión y mandó un tuit retractándose. No me extrañaría que ahora sucediese lo mismo. Mientras tanto, Pedro Sánchez estuvo en parte de ese encuentro invitado por Macron, que ha hecho al español algunas «pirulas» en asuntos de la UE, como, por ejemplo, a la hora de elegir los cargos más importantes. Sin embargo, su presencia allí ha pasado más que desapercibida, incluso en España. Ahora anda metido de lleno otra vez en su campaña de imagen reuniéndose con la sociedad civil de cara, o a la investidura, o a las elecciones generales. Si fuese para lo primero, habría que recordarle que debe encontrarse con los representantes de los otros grupos políticos para buscar su apoyo. El problema radica en que casi ninguno se fía de él. Vamos, que tiene el mismo problema que Trump.