Andaluz, hazte nacionalista

Si en vez de alimentar el trinque del socialista gordinflón, los andaluces hubiéramos cebado a rateros nacionalistas, tendríamos una ventaja: a un ladrón de frente nadie le roba. La única manera de hacerse respetar en la nación de naciones es proclamando con énfasis la identidad soberana. Habla andaluz, cecea, sesea, que no te entiendan en el telediario y utilicen traducción simultánea. Si sigues pronunciando fino cuando un forastero, inferior a ti, por supuesto, te pregunta por la calle, estás perdiendo millones de euros que se derivan hacia las repúblicas que hacen lo contrario que tú, andaluz de los cojones, dar por saco hasta reventar.

No podemos permanecer un día más con este susurro a nuestras espaldas, trazado a tiza, que nos llama pueblo cobarde, que mucho carnaval pero el referéndum de cartón no se celebró en el Teatro Falla, y ahí tienes que envainártela, deja de vivir de las bombas que tiran los fanfarrones, de ridículo púlpito constitucional, y arenga al Califato de Córdoba, que un día traspasó Lérida, llamada Larida, y llegó al Condado de Barcelona, espolea al reino de Granada, y así por todos los siglos hasta el Cantón de Cádiz. Si eso no es una nación que se me paren los pulsos. Que no hay quien os entienda, que ahí está Góngora para el que quiera traducirlo, Séneca, Averroes, y el pan con manteca colorá para darle un cacho a Pedro Sánchez y a la ministra traidora, la «botifler» andaluza que nos quita el dinero que ella misma no supo cuadrar. Y eso me temo que era por algo, que vengo de Cái y están las palmeras mustias y los parados esperando el autobús porque a esta señora le sale del bendito alfajor de Medina Sidonia o de los alcauciles de Conil de la Frontera.

Ella, que es de Sevilla, pariente lejana de Trajano y Adriano, emperadores que nunca superaron los nacidos en la misma Roma, andaluces que gobernaron el orbe civilizado, incluida Tarraco, y está al mando de un castellano sin linaje, hijo de Sancho sin más. Andaluces, y andaluzas, levantaos y envolveros en la bandera sin ese complejo de que se van a reír de vosotros. Que en los colegios se estudie a Lorca pero no a Dalí que al cabo era el tío del bigote. Llamemos a la América que descubrieron los barcos de Huelva a que se unan a los países andaluces, y dejemos a este sieso, a esta cabeza de gamba, con la palabra en la boca. Un CDR en cada pico de Sierra Morena y ya veréis lo pronto que nos dan el taco.