Comentarios machistas

El presidente de México, de extrema izquierda y cuyo nombre responde a las iniciales de AMLO, ha dicho unas palabras que no tienen desperdicio, y es que ve esencial que las mujeres se queden en casa para combatir el coronavirus, así cuidarán de los maridos y los padres. Y yo me pregunto dónde están las feministas patrias para poner verde semejantes declaraciones machistas prehistóricas, esas que se manifestaron el 8M, algo que, según la vicepresidente Calvo “nos va la vida en ello”. El tipo da bastante asco y no es la primera vez que mete la pata hasta el fondo ya que hace no mucho aseguraba que lo del Covid 19 era poco menos que una chuminada y que se negaba a hacerse las pruebas pese a los infectados habidos en su gabinete. ¡Y no pasa nada! Es muy curiosa esa inmunidad que tienen los de ultraizquierda para irse de rositas de todas sus tropelías cuando están en el gobierno. No hay más que echar un vistazo al panorama patrio. Hemos sido el país que más tardó en tomar medidas preventivas. A quienes querían suspender los viajes a China y la entrada de pateras lo llamaban racista, xenófobo, lo peor, vamos. Y así sigue siendo. Y se sigue permitiendo el desembarco de pateras repletas de una inmigración que hace peligrar nuestra salud, por mucho que Marlaska diga que no podemos adoptar actitudes fascistas. Odio el calificativo de fascista utilizado fuera de lugar, como hacen los que nos gobiernan y los de su cuerda comunista. Por lo menos que a quienes entran ilegalmente en nuestras costas les sometan a las pruebas pertinentes. Por cierto, llaman fascista también al pobre Ortega Lara porque es miembro activo de Vox. Es exasperante ver cómo insultan a un pobre hombre que estuvo secuestrado 532 días en un zulo por la banda asesina ETA, mientras homenajean con vítores a sus cancerberos, se les festeja, el gobierno pacta con ellos para seguir en el poder, y, en el exterior, por ejemplo en Estados Unidos, los consideran “romantic fighters for freedom”. Eso lo oí yo con mis propios oídos hace años.

En fin, sigamos comentando, que no nos abrume la desesperación porque hay noticias para la esperanza. Un señor de una empresa farmacéutica asegura que un compuesto marino llamado Aplidin, que en Australia viene aplicándose para el mieloma múltiple, está resultando ser un antiviral potentísimo para combatir el coronavirus, con lo cual se abren muchas esperanzas para quienes pertenecen a los grupos de más riesgo. También para los que aspiramos a volver a la normalidad sin temor a contaminarnos, sabiendo que nadie está libre de contagios. Quizá el diabólico Fernando Simón, montado en moto y con chupa de cuero, como aparece en un semanal este sábado, anuncie la buena nueva y dando por resuelta y finalizada la pandemia.

Por lo demás, sin novedad. Cuentan los cotilleos que se divorcian el maestro Ponce y Paloma Cuevas, ¡quién lo iba a suponer! Dicen que hay una mocita de por medio; los Reyes siguen recorriendo el territorio patrio, ella con modelos de tiendas low cost; Iker Casillas deja Oporto y vuelve a la patria, y Tamara Griñón se mete de hoz y coz en el mundo de la cocina en un programa que hará de la mano del chef Javier Peña y bajo el título de “Cocina al punto” protagonizarán este espacio en el que ambos recorrerán España para cocinar y poner en valor la gastronomía de cada rincón del país. Esta semana iré a probar alguno de los platos que realicen y les contaré. Al fin y al cabo comer y beber rico es de las cosas que más consuelan las tristezas de la vida.