Opinión
Hoy hace un año
El tiempo sólo asoma en la desdicha y así la memoria sólo es el registro del dolor. Lo dice Juan Benet en «Volverás a Región», y, en este caso, lleva más razón que un santo. Hoy, 10 de noviembre, se cumple un año de las elecciones que dieron paso al primer Gobierno de coalición en España, un Gobierno de izquierdas con el respaldo interesado de los nacionalistas de la periferia. En apariencia aquí no ha pasado nada. Todo sigue igual. El cielo está nuboso, como aquel día. Llueve ligeramente. Los árboles del jardín van perdiendo las hojas color cobre . Ha vuelto el petirrojo y quedan los últimos membrillos en el arbolillo de la entrada. No tardarán en pasar las grullas. El cambio, lo que va de ayer a hoy, se nota cuando te asomas a la calle. Todo el mundo, hasta los que sacan a pasear el perro, van con mascarilla. La gente camina deprisa, cabizbaja y silenciosa. Parece claro que está más triste y más preocupada que hace un año.
No le falta razón. Ha sido un año horrible, el peor que se recuerda, y aún seguimos buscando la salida. Pesan los 60.000 muertos de la pandemia y la falta de confianza en los poderes públicos. Cierran miles de pequeños negocios, vuelven las colas del hambre, se llenan de pacientes las Ucis de los hospitales y las funerarias ofrecen pagar a plazo los servicios. Lo asombroso es que tanta desdicha, el registro de tanto dolor, sólo haya conducido a parar el reloj de la política, que parece petrificado. Según las últimas encuestas, todo sigue igual, sobre poco más o menos. Si hoy volviera a haber elecciones, las izquierdas y las fuerzas disgregadoras de la periferia, aunque fuera por los pelos, volverían a formar Gobierno frente a la división de la derecha, que sigue ensimismada, perdida en guerras particulares. Y eso que cualquiera ha podido comprobar que éste no es un Gobierno de garantías para hacer frente al tremendo reto que tiene por delante. Al contrario. Para qué hablar de las constantes amenazas en estos doce meses al sistema constitucional. En altos observatorios europeos apuntan que España sufre el peor Gobierno en el peor momento. Una desgracia más.
Mientras escribo, se ha abierto el cielo y vuelve a brillar el sol. ¿Será un buen presagio? En el abeto del jardín vecino canta, indiferente, una torcaz.
✕
Accede a tu cuenta para comentar