De un tiempo a esta parte, a Pedro Sánchez le están saliendo más canas. Basta observar las últimas fotografías. Envejece a ojos vista. Debe de estar pasándolo mal. Se le ve menos animoso, más cabizbajo, como cansado y apagado. A ratos parece cabreado. Es natural. Al presidente se le amontonan los problemas. Trata de disimularlo en sus comparecencias, pero no...
¿Quieres leer más?
Has accedido a un contenido premium de La Razón. Suscríbete a Younews y tendrás acceso ilimitado a las mejores opiniones, análisis y otros contenidos exclusivos. Una suscripción que va más allá de las noticias, y para que lo pruebes te regalamos un mes gratis.
Has accedido a un contenido premium de La Razón. Te regalamos 10 contenidos gratis para que pruebes.
Tienes artículos disponibles
Inicia sesión si ya eres suscriptor
Este farsante es un pelele en manos del moños, y tan cobarde que no se atreve a pararle loa pies. Entre los dos estan llevando el pais a la ruina