Rey

El 0,3 por ciento de Iglesias

Iglesias puede seguir con su campaña y soñar con que los españoles hablemos estos días del futuro de la Corona. Lo siento, pero tenemos otras cosas más importantes, incluidas las familiares, que son objeto de nuestra atención

El vicepresidente del Gobierno está en su derecho a la hora de ocupar su tiempo en lo que considere más conveniente, aunque parece que algunas de sus preocupaciones son realmente irrelevantes para la opinión pública. Otra cuestión distinta es que le permitan seguir con su campaña de agitación política y proyección mediática. La encuesta del CIS desmonta su ofensiva más preciada que es contra la Corona y señala que solo un 0,3 por ciento de los españoles está preocupado con la Monarquía. No parece que sea precisamente un éxito que se corresponda con su esfuerzo y dedicación para convertirse en la némesis de la institución.

En este sentido, la encuesta que publicábamos ayer le concede un «meritorio» 3,4 de valoración junto con Isabel Celaá y Alberto Garzón. Lo único positivo es que supera el 3,3 de Juan Carlos Campo, Irene Montero y Manuel Castells. Y le gana Yolanda Díaz con un 4. Es muy significativo que, a pesar de la fuerte polarización, la titular de Empleo le derrote, aunque como se llevan bien no le importará. Otra cuestión distinta es que el sector comunista y antisistema del Gobierno obtiene los peores resultados del gabinete, aunque acompañado, significativamente, por el ministro de Justicia.

Un dato muy interesante de la otra que publicábamos el domingo es que Felipe VI consigue un 6,3, que es una cifra que refleja, sin lugar a dudas, un apoyo muy superior al que logran los políticos. Es casi el doble que Iglesias. En este sentido, el 53,1 por ciento quiere la Monarquía como forma de Estado frente a un 39,2, pero esto no significa que estos últimos estuvieran dispuestos a apoyar la caída de la institución para comenzar un proceso constituyente hacia la república bolivariana a la española que desearía el líder de Podemos. A esto hay que añadir, además, que muchos lo son de forma sentimental y no que quieran sumarse al proceso rupturista que la izquierda radical y el independentismo consideran prioritario.

La realidad es que hacen mucho ruido y parece que es un tema prioritario cuando es, simplemente, irrelevante. El rey está ejerciendo su magistratura de forma ejemplar, con sensibilidad hacía los problemas que afectan a los españoles y con el sentido del deber que es el eje de su actuación desde que se convirtió en príncipe de Asturias. Iglesias puede seguir con su campaña y soñar con que los españoles hablemos estos días del futuro de la Corona. Lo siento, pero tenemos otras cosas más importantes, incluidas las familiares, que son objeto de nuestra atención.