Política

La nueva ofensiva contra Ayuso

La única idea original que tiene este Gobierno es destruir al motor de la economía española

Hay que reconocer que no se le puede negar a este Gobierno la virtud de la perseverancia, aunque mal empleada porque la destina contra Madrid. El odio a Ayuso se ha convertido, desgraciadamente, en una prioridad donde los miembros del Ejecutivo se dedican a perjudicar a la comunidad que es el motor de nuestra economía con el fin de atacar a su presidenta. El otro día le correspondió el honor a la delegada del gobierno, Mercedes González, que leyó el argumentario, sin reflexionar las chorradas que decía, sobre las inversiones que se realizan en Madrid. Es un fiel reflejo del nivel de algunos políticos, porque parece que el único mérito para ocupar un cargo es el dedazo del líder. Ahora sabemos que el Estado ha invertido este año 7.775 millones en la región y para alcanzar esta cifra «mágica» se incluyen las pensiones, los ERTE, la deuda, la PAC, el IMV, los avales del ICO… y se les olvidó incluir la gasolina de los coches del Parque Móvil, el material de oficina y tantas otras cosas que gastan los departamentos en la capital.

Desde luego, están «Cumpliendo», aunque no se sabe muy bien ni el qué ni con quien. Bueno, tengo que matizar esta afirmación porque cumplen en su entreguismo con los independentistas catalanes y los nacionalistas vascos que también lo son, pero el PNV anda sosegado mientras se dedica a saquear el Estado. No contentos con enviar a González para que hiciera el ridículo, ahora le ha tocado al ministro de las «pensiones», José Luis Escrivá, que es mejor economista que político y ha decidido sumarse a la ofensiva. Es posible que le afectara la tramontana y tras reunirse con Ximo Puig ha decidido apoyar el impuesto contra Madrid con el fin de compensar el efecto capitalidad. Lo hace porque «es una idea con mucho recorrido que hay que seguir explorando». Me sorprende que alguien con su trayectoria profesional en el Banco de España y en numerosos organismos internacionales defienda un esperpento de estas dimensiones. En lugar de pedir que las comunidades autónomas gestionen mejor, controlen el gasto público, sean competitivas y simplifiquen sus estructuras, la única idea original que tiene este Gobierno es destruir al motor de la economía española y seguir con la campaña de acoso contra Ayuso. No aprenden.