Medio Ambiente

Planeta habitable

Los motivos humanitarios están por encima de los logros personales o de cualquier otro tipo

Cada día estamos más concienciados de que el contacto con la naturaleza (privado durante el estricto confinamiento aquellos inolvidables y ojalá irrepetibles meses) es fundamental para mantener el equilibrio y la fortaleza mental. Ayer fue el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono.

En la Convención de Viena sobre la protección de la capa de ozono, en 1985, se dio a conocer el agotamiento de la capa de ozono (franja frágil de gas que protege la Tierra de los efectos nocivos de los rayos solares).

Cuidar el ozono de la estratosfera es vital porque absorbe gran parte de la radiación ultravioleta del Sol.

El 16 de septiembre de 1987 se firmó el Protocolo de Montreal, uno de los acuerdos medioambientales más exitosos hasta la fecha y que puso el foco en las sustancias que agotan la capa de ozono.

Este año, la celebración del Día Mundial del Ozono tiene como objetivo la desaceleración del cambio climático y el aumento de la eficiencia energética.

Una capa de ozono sana protege la salud de los seres humanos, las plantas, los animales, los ecosistemas y las economías.

Seamos conscientes de que no podemos sobrevivir sin la capa de ozono, hemos de seguir colaborando para protegerla.

Y, por cierto, no quiero terminar sin resaltar un hecho que protege y defiende a toda la humanidad: la reina del ajedrez y triple campeona del mundo, Anna Muzychuk, rechazó jugar en Arabia Saudita en defensa de todas esas mujeres cuyos derechos y libertades aún están siendo mermados y/o condicionados: «Me niego a jugar con reglas especiales, como usar “abaya” o estar acompañada por un hombre para salir del hotel. Voy a perder dos títulos mundiales. Es desagradable, pero no puedo sentirme una persona de segunda clase.»

Bravo por ella, porque no solo rompió así el silencio impuesto a miles de mujeres en todo el mundo, sino que mostró que los motivos humanitarios están por encima de los logros personales o de cualquier otro tipo. Demuestra que contamos todos y que hemos de actuar como colectividad y no individualmente, porque de esto también depende que nuestro planeta sea cada día más habitable.