Política

El destino de Ciudadanos

«El PP está a la espera de lo que ocurra en las primarias para echar las redes»

El último (hasta ahora) intento de consolidar un partido de centro liberal en España vive estos días horas cruciales. Los militantes de Ciudadanos están llamados a elegir en primarias a quien tendrá el reto de mantener a flote el proyecto o, por el contrario, el infortunio de enterrarlo. Aun así, lo que haya de ser Ciudadanos en el futuro cercano no lo decidirán quienes ahora participen en las primarias, sino el conjunto de los españoles, que pondrán a cada partido en su sitio en los sucesivos procesos electorales que se avecinan: municipales y autonómicas en mayo, y generales a final de año, salvo que el presidente del Gobierno tenga mejor opinión.

Si Ciudadanos consigue sobrevivir a las elecciones de mayo (mantener una mínima representación territorial), su gran objetivo en las generales sería no desaparecer del Parlamento. Un solo diputado ya permitiría sostener la antorcha. Y, quién sabe, quizá el PP de Feijóo pudiera necesitar ese escaño para gobernar, lo que supondría una decisiva transformación de Ciudadanos: podría parecer que vuelve a ser un partido útil.

Porque ese es el eterno drama del centro liberal en España: que siempre llega el momento en el cual el electorado decide que ha dejado de ser útil. Ocurrió con la UCD, que pasó del gobierno a la desaparición. Adolfo Suárez lo experimentó por segunda con el Centro Democrático y Social, que tuvo un momento de efervescencia, hasta que la espuma se esfumó. La UPyD de Rosa Díez surgió con una vocación similar, hasta que fue engullida por Ciudadanos. Y ahora, el votante de Ciudadanos se ha dispersado: mayoritariamente huye al PP, salvo un porcentaje menor que acude a Vox, y a excepción de Cataluña, donde alimenta a los socialistas.

El PP está a la espera de lo que ocurra en las primarias para echar las redes y someter a lo que quede de Ciudadanos al conocido método de pesca de arrastre, para llevarse –si puede– parte del talento político que atesora el partido que hoy lidera Inés Arrimadas y que aspira a liderar Edmundo Bal. Hace solo cinco años, los sondeos auguraban una inminente victoria electoral de Ciudadanos.