Editorial

Agobiados por las deudas

Un millón de familias españolas ha tenido que recurrir en los últimos años –plagados de crisis consecutivas– a la reunificación de deudas para no verse abocadas a la ruina y a los embargos

Las deudas no tienen padre ni madre y no tienen compasión con aquellos que las sufren, sobre todo cuando las crisis aprietan o los negocios no salen como uno espera. Un millón de familias españolas ha tenido que recurrir en los últimos años –plagados de crisis consecutivas– a la reunificación de deudas para no verse abocadas a la ruina y a los embargos. Solo en el último año, cerca de 18.000 familias recurrieron a un servicio financiero para agrupar su agujero económico, y llevar la cifra global a rozar la frontera simbólica del millón. Para el Gobierno de Pedro Sánchez la economía nacional va como un cohete, pero debe ser solo para ellos o para unos pocos. La realidad es que decenas de miles de hogares sufren para llegar a fin de mes o se ven incapaces de afrontar los pagos que les agobian. Si esto es así, es que algo no está funcionando en el país color de rosa de Sánchez.