A pesar del...

Antiliberales con Warren: el FMI

Pero lo más entrañable es eso que el FMI «no entra en política». Es al revés, es pura política, es una creación de los Estados para recibir financiación para no bajar el gasto público cuando nadie más les presta

El diario «El País» llevó a portada esta declaración de Pierre-Olivier Gourinchas, economista jefe del Fondo Monetario Internacional: «Bajar impuestos en España iría en la dirección incorrecta». La entrevista incluía una colección de tópicos antiliberales políticamente correctos, sin que faltaran la atribución de la inflación a los malvados beneficios empresariales, la «inflación de la avaricia»; o la advertencia de que los bancos centrales han de «combatir esta inflación sin provocar una recesión», como si la inflación no la hubiesen provocado ellos; o la amena y también dramática pregunta, «¿No deben hacer nada los gobiernos?», como si no estuviéramos donde estamos precisamente por lo que hicieron los gobiernos.

Pero detengámonos en la intencionada pregunta: «¿Cree que es el momento de bajar impuestos?», y esta deliciosa respuesta de don Pierre-Olivier: «No lo creo. Tenemos un problema de inflación, ¿qué es lo que haría una rebaja de impuestos? Empeoraría el problema. Eso va en la dirección equivocada. Las autoridades deben reconstruir sus colchones fiscales y reducir su ratio de deuda sobre PIB, generando superávits, lo que ayudará a reducir la inflación y también a prepararse para futuros shocks. Llevar a cabo una rebaja de impuestos iría en la dirección incorrecta, pero no entro en política».

Esta es la típica argumentación keynesiana, que descansa sobre la llamada inflación de demanda, y apuesta por la reducción de los déficits y la deuda mediante la subida de la recaudación fiscal, y no mediante la disminución del gasto público y los impuestos, algo que, por cierto, ha sido cuestionado técnicamente por economistas como Alberto Alesina y otros. Pero lo más entrañable es eso que el FMI «no entra en política». Es al revés, es pura política, es una creación de los Estados para recibir financiación para no bajar el gasto público cuando nadie más les presta, y para avalar las políticas antiliberales hegemónicas –puede verse el vídeo de Charlas con #UstedSeñora «El FMI recomienda subir los impuestos: ¡vaya, qué sorpresa!», aquí: bit.ly/46A6nkc.

Warren Sánchez, el hombre que tiene todas las respuestas, pero que quizá no tenga todos los votos que anhela el 23 de julio, tuvo sin duda una alegría al leer en «El País» otra recomendación intervencionista del FMI. Recomendación que, vaya por Dios, qué casualidad, es justo lo que propicia la izquierda en sus habituales incursiones punitivas contra los contribuyentes.